Un episodio digno de una película se ficción de vivió en Rufino en la noche del sábado -Indica Venado 24– cuando un hombre baleó a su pareja y a su dos hijas, luego en otra vivienda hirió a otra persona perteneciente a su familia y huyó para posteriormente trenzarse en un intercambio de balacera con integrantes de la fuerza policial. El saldo de los acontecimientos: la mujer de 42 años con disparos en el abdomen junto con una de sus hijas de 14 años, con balas en sus piernas internadas en el Hospital de Rufino, ambas estables y por ahora fuera de peligro.
La otra hija de 10 años tiene heridas más graves en su espalda y fue trasladada primero al hospital de Venado Tuerto y luego al Hospital de Niños Vilela en Rosario. Y finalmente el otro lesionado es un sobrino del agresor internado también en el hospital de Rufino con dos costillas quebradas por los disparos y con un orificio de entrada y salida en el brazo izquierdo.
Así según el relato realizado por el fiscal de la causa Mauricio Clavero, los hechos comenzaron pasada las 21 del sábado cuando Bomberos de Rufino reciben la notificación de una vivienda incendiada en la zona rural de la localidad, en tanto casi simultáneamente el Comando Radioeléctrico es avisado que se encuentra una mujer herida en el alojamiento Cruz del Sur ubicado en la calle Asamblea y Ruta Nº 7 .
De este modo los bomberos apenas llegan a la vivienda incendiada se encuentran con la primera víctima la niña de 14 años que rápidamente fue asistida y traslada al hospital local. Mientras tanto casi en el mismo momento los integrantes del Comando hallan a la mujer junto a su otra hija de 10 años, quienes también fueron trasladadas al nosocomio oficial.
Seguidamente se comienza un operativo cerrojo para intentar dar con el agresor e ingresa otra llamada al 911 informando que había un tiroteo en el barrio General San Martín (zona norte de Rufino). Allí acude la fuerza policial y se encuentra con que la vivienda pertenece a una familia del propio delincuente a esta altura buscado y que un sobrino de éste se encontraba herido de bala.
Posteriormente se inicia una persecución, que para darle mayor dramatismo, incluye una balacera cruzada entre las fuerzas policiales y el fugitivo que logra huir y guarnecerse en un descampado con una importante cantidad de maleza. En ese lugar se parapeta y comienza a realizar una serie de disparos en ráfaga con su carabina calibre 22 con mira telescópica. “Se escuchaban silbar las balas, descargaba y cargaba el cargador en el instante. Estaba escondido en la maleza y no se podía dar con él”, cuenta el fiscal que en ese momento se hallaba en el lugar guarnecido detrás de un tapial.
En el medio de tensa situación aparecen familiares de la última víctima, y por lo tanto del propio perseguido, que se meten en la línea de fuego (algunos de ellos armados) e intentan ajusticiarlo. “Así que el trabajo policial tuvo que redoblarse para proteger y correr a esta gente”, siguió diciendo Clavero.
Lo cierto es que el episodio, digno de una película de ficción, culminó cuando cerca de la medianoche del mismo día agentes de Los Pumas pudieron encontrar al delincuente dentro de una cuneta y luego de asentarle un disparo en una de sus piernas lo aprehenden.
“Tengo que destacar el accionar policial ya que el operativo fue muy prolijo. Fue una situación muy tensa muy difícil y se trabajó con un gran profesionalismo”, resaltó el fiscal. Además manifestó que el agresor (se confirmó extraoficialmente que su nombre es Mario Gossa) fue llevado a una clínica privada de Rufino donde se le realizaron las curaciones pertinentes y luego trasladado a la Alcaldía de Melincué.
En las próximas horas se realizará la audiencia imputativa bajo la acusación de homicidio en grado de tentativa (cuatro víctimas) agravado por el femicidio, estrago doloso, portación de arma de fuego y resistencia y atentado a la autoridad.(Foto Rufino Web)