El Municipio de Lincoln, a cargo del Intendente, Salvador Serenal, un abogado y militante radical desde muy joven, que ganó las elecciones del 2015 por Cambiemos venciendo al ex Jefe Comunal, Jorge Fernández, a quien luego denunció y logró que lo encarcelen por supuestos actos de corrupción, es uno de los mejores ejemplos de nepotismo en el interior bonaerense.
De acuerdo con una investigación que publica en su portal, Semanario de Junín, varios familiares del Jefe Comunal, incluida su esposa, hermana, tía, cuñado y primo, se suman a una lista interminable de funcionarios y empleados municipales que ingresaron con la gestión iniciada en 2015, un verdadero entramado de parientes que conforman, con el perdón de la pymes, una suerte de emprendimiento familiar.
Este lunes, cuando Serenal todavía festejaba la detención del ex intendente Fernández, le cayó como un baldazo de agua fría escuchar al presidente los anuncios sobre el ajuste en el Estado, en particular la prohibición de mantener a familiares de funcionarios en la estructura del Estado, que impacta tanto a tirios como a troyanos, sus daños colaterales recién se comienzan a registrarse.
La primera “víctima”
Este primer caso, al que en los próximos días le seguirán otros que venían siendo denunciados pero que no alcanzaban la repercusión que ahora les da la propia decisión presidencial, resulta tan notorio como obsceno, por la cantidad de parientes que involucran tanto al jefe comunal, como a otros funcionarios de rango de la estructura municipal de Lincoln.
La lista es encabezada por Karina Ruiz, esposa del intendente Serenal, con el cargo de Directora de Tercera Edad del Municipio, dirección que se ocupa de los temas previsionales y que tiene a cargo un concurrido hogar de ancianos, donde es secundada por su tía materna, Estela García.
María Isabel “Marisa” Serenal, hermana mayor del intendente, ocupa la Secretaria de Cultura, y su esposo, Carlos Alberto Lo Papa, es decir, el cuñado del Jefe Comunal, es Director de Desarrollo Agroindustrial.
Ruben Garcia, hermano de la madre de Serenal, es decir, su tío, es Director de Vialidad Municipal; cierra la lista de familiares directos del Intendente, su primo Juan Cruz Martínez, como Secretario de Producción del Municipio.
Segunda línea
El informe de Semanario también revela el entramado de familiares nombrados en distintos cargos no sólo en la estructura municipal, sino además, en organismos de la provincia y de nación.
El Secretario de Gobierno, Ramon Parera, tiene a su esposa, Valeria Menna, como Secretaria de Acción Social, y a su sobrina Chiara Belloso, como directora de juventud, dependiente de la Secretaria de Acción Social.
Fabiana del Moro, esposa del presidente de bloque de Concejales de Cambiemos, Diego Ramos, es Directora Asociada del hospital municipal. Por su parte, el jefe de personal, Luis Latasa, ubicó a su esposa, Maria Arce, como titular de la OMIC.
German Martínez, Director de Discapacidad del municipio, tiene a su esposa, la abogada Romina Zaldua, como Delegada del Ministerio de Trabajo de la provincia de Buenos Aires, en Lincoln.
El chofer privado del intendente, empleado municipal, aunque con cargo político de Jefe de Choferes, Pablo Juan Carlini, ubicó a su esposa Cintia Rojo, como Secretaria Privada de Serenal, que a su vez reemplazó a la anterior secretaria, que ahora revista como encargada de la delegación Lincoln del IPS.
Roles llamativos
El Concejal Guillermo Gastaldi, tiene a su esposa, Paola Capurro, como encargada de la distribución de mercadería en el área social.
Susana González, abogada y directora del Centro de Orientación Familiar del Municipio, COAF, es socia en el estudio jurídico de la secretaria de Acción Social, Valeria Menna, esposa del secretario de gobierno, Ramón Parera. Además, es madrina de bautismo de la hija de ambos. A su vez, la tercera socia del “estudio González, Mena, Arzani”, Gabriela Arzani, es subdirectora de Asuntos Legales del Municipio.
La lista de funcionarios con parentesco de la Municipalidad de Lincoln, la cierra el secretario de Obras Públicas, Roberto Cosentino, cuyo hijo, Matias, es Jefe de Compras del Municipio.
En principio, nombrar parientes en funciones ejecutivas, no configura delito alguno. Seguramente muchos de ellos tendrán que renunciar y con ello, quizás, se estará cometiendo injusticias, por el aporte que cada uno dejará de dar en el Estado municipal. Pero también, según consigna la publicación de Semanario, este entramado familiar puede “formar parte de lo que muchos sospechan, es un fabuloso negocio”, del que probablemente la oposición se ocupe de investigar. (InfoGEI)