La Fundación Activismo Feminista Digital denunció que durante 2017 recibió unas cinco denuncias diarias por acoso virtual y publicación de imágenes y videos íntimos.
Según el informe, el 75% de las denuncias se vinculó con la difusión no consentida de imágenes íntimas y el 25%, con el acoso virtual. Además, las estadísticas relevadas detallaron que un 45% de esas fotografías o videos se dieron a conocer a través de redes sociales; el 29%, por servicios de mensajería instantánea como WhatsApp, y el 16%, en sitios web de pornografía. La franja etaria más vulnerable es la que va de los 22 a los 35 años, y la Provincia de Buenos Aires concentró el 48% de los casos.
En tal sentido, Marina Benítez Demtschenko, presidenta y fundadora de la organización que en diciembre último se presentó ante la ONU junto con la Asociación por los Derechos Civiles (ADC), expresó que “cada día son más los casos de mujeres que ven vulnerados sus derechos en las plataformas virtuales”.
En este sentido, afirmó que “la violencia de género digital tiene como característica la permanencia: es un acto que queda eternamente porque el contenido no se puede eliminar y la viralización magnifica el daño”.
“Es una modalidad nueva de una violencia tradicional”, explicó Benítez, ya que “el 44% de los casos de violencia digital tiene como trasfondo casos de violencia doméstica”, según los registros que realiza la organización, ya que no hay estadísticas oficiales acerca de la problemática. (InfoGEI)