Violencia sin tregua en Rosario: Sicarios ingresan a hospital y asesinan a policía

El Barrio Martín en Rosario se convirtió en escenario de terror cuando cuatro sicarios irrumpieron en el Hospital Provincial, dejando tras de sí un rastro de violencia que se cobró la vida del policía Leoncio Bermúdez. Bermúdez, de 40 años, recibió un disparo en la cabeza en un ataque cuyas motivaciones aún se desconocen.

El foco del incidente fue Gabriel Lencina, un recluso condenado a 22 años por violentos crímenes, trasladado por el Servicio Penitenciario. Las autoridades investigan si los atacantes buscaban rescatarlo o si el asesinato estaba premeditado. La fiscal Gisela Paolicelli lidera la investigación.

El suceso ocurrió después de las 22 horas del martes, cuando los sicarios, a bordo de un Fiat Uno Blanco, ingresaron al hospital ubicado en las calles Alem y Zeballos. Bermúdez fue blanco de un disparo mortal en la cabeza, mientras que una enfermera resultó herida con dos disparos en las piernas.

Tras el ataque, Bermúdez fue trasladado al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (HECA), pero los esfuerzos médicos fueron en vano, falleciendo alrededor de las 23 horas del mismo día. Mientras los médicos luchaban por salvarlo, se desplegó un operativo en las cercanías del hospital para recopilar pruebas.

La escena del crimen reveló seis vainas servidas, sangre y el cargador de la pistola del oficial en el suelo, mientras que su arma estaría bajo resguardo de la Policía Motorizada. Esta tragedia se suma a una semana de violencia sin freno en Rosario, con un total de ocho víctimas en siete días, evidenciando la cruda realidad que enfrenta la ciudad.

Los recientes eventos sangrientos en Rosario incluyen asesinatos en serie, atentados selectivos y mensajes amenazantes. La población vive con miedo y la incertidumbre crece con cada víctima fatal. La ciudad se ve envuelta en una espiral de violencia sin precedentes, desafiando los esfuerzos de las autoridades por contener esta ola de crímenes que ensombrece sus calles.