Venado Tuerto: Prisión preventiva para la banda de cuatreros que asoló la región

El viernes pasado se realizaron en los tribunales de Venado Tuerto las audiencias imputativas y cautelar a cinco hombres (padre e hijos) sospechosos de formar parte de una banda dedicada al abigeato en zona rural de la ciudad y la región, en el marco de una investigación de, por lo menos, 20 hechos denunciados en Fiscalía en el término de tres meses.Los cuatreros tenían su asiento en una vieja estación de servicio de Ruta 8 kiloómetro 357 y desde alli operaban, con despostadero y cámaras de refrigeración.

El fiscal Iván Raposo imputó a los cinco detenidos en el transcurso de la semana por un hecho de abigeato en grado de tentativa, abigeato agravado, daños calificados, y a dos de ellos –además- por tenencia ilegal de arma de uso civil y acopio de armas y municiones, respectivamente. El representante del MPA solicitó la prisión preventiva para los cinco, que fue concedida por el juez Adrián Godoy por el término de 8 meses, pero solo para cuatro de ellos, ya que consideró que los indicios probatorios referidos a uno de los jóvenes no eran suficientes. Los allanamientos se realizaron el martes en distintos puntos de la ciudad y la región.

Raposo anticipó que no apelará la decisión del magistrado, y que se abocará a consolidar las pruebas que involucran a las personas detenidas y a verificar que no existan coautores que estén en libertad, además de determinar quiénes eran los compradores de esa mercadería de origen ilícito.

Los detenidos

Los cinco detenidos, padre y cuatro hijos, dieron como domicilio la dirección de Tucumán y Caparrós de la ciudad de Venado Tuerto, aunque no compartían la misma morada, dado que se trataría de una vivienda familiar y departamentos internos. Un dato que fue marcado por el fiscal es durante el proceso se los consultó por su actividad y todos manifestaron realizar trabajos en la construcción, aunque en el lugar no se hallaron herramientas relacionadas con el rubro.

En cambio, sí fueron hallados en dos de los domicilios allanados distintos elementos que se usan en carnicerías y para la faena de animales y preservación de carnes. Incluso en la casa paterna se produjo del hallazgo de un arma, una importante cantidad de dinero en efectivo y una media res colgando de un gancho. Otra prueba ofrecida por el fiscal es la tenencia de los imputados de varios vehículos, en algunos de los cuales se hallaron rastros de sangre.

Los cinco detenidos pidieron declarar y manifestaron ante el magistrado su inocencia. En forma extraordinaria una gran cantidad de personas, relacionados con los imputados, asistieron a las más de dos horas de audiencia que demandó la presentación judicial.

Los hechos

Según expresó el fiscal Raposo, el primer hecho denunciado por un vecino ocurrió el pasado 4 de abril y permitió obtener el hilo conductor que luego llevó a los investigadores a dar con la banda.

Un productor que transitaba por un camino rural, de acceso en la zona norte al Aeródromo, vio movimientos en el campo de su vecino Nuic y un vehículo estacionado, en el lugar había dos o tres personas arrastrando con una soga un animal, el conductor al ver su cercanía los cargó y huyó rápidamente marcha atrás con rumbo hacia Venado Tuerto, aunque alcanzó a ver con claridad la marca y patente de una Meriva color gris, que era conducida por un “hombre mayor” acompañado por varios jóvenes.

Al acercarse al punto donde vio a los intrusos, observó a un novillo caído y otro pataleando en los últimos estertores, ambos tenían un balazo en la cabeza.

El segundo hecho atribuido a la banda, ocurrió el 9 de abril a las 20.45 en zona rural de Elortondo, donde un productor ganadero que recorría su propiedad en una moto, observó que sobre la ruta 90 había un auto blanco y que del campo emergían dos personas con bultos en las manos, sin poder determinar qué tenían. El ruralista se acercó al auto y le dio un fuerte puñetazo al parabrisas, huyendo los intrusos, un hombre grande y dos o tres jóvenes, en dirección hacia Chapuy.

En el lugar quedaron tres terneros muertos con un tiro en la cabeza y uno de ellos ya retirados sus cuartos traseros. Luego el propietario pudo determinar que también había otros cinco animales heridos a balazos.

Allanamientos

Los imputados tenían cada uno por lo menos un vehículo tipo pick up, excepto uno de los que usaba un VW Gol blanco, propiedad de su pareja y que fue hallado por los investigadores en un taller con el parabrisas estallado. La Meriva avistada en su momento, había sido vendida a los pocos días.

Uno de los imputados fue hallado y detenido en el viejo edificio de un motel abandonado ubicado en la ruta 8 –contiguo a una estación de servicio también abandonada-, donde además se encontraron heladeras, un freezer con carne, ganchos, sierras y elementos de uso frigorífico. También cinco armas cortas y largas y una gran cantidad de municiones.

 

FUENTE: Norma Migueles – Radio Jota 98.3