Venado Tuerto: juzgan a cinco acusados de integrar una banda narcorcocriminal que era comandada desde la cárcel

Los acusados están señalados de ser parte de una organización que comercializaba cocaína y marihuana en la zona. Su líder está también imputado de haber ordenado un atentado contra otra mujer imputada. Mientras, se investiga su vínculo con amenazas sufridas por fiscales, jueces y autoridades del gobierno municipal.

Esta semana continuó en Venado Tuerto el juicio a cinco integrantes de una banda narcocriminal cuyo líder y financista manejaba desde su lugar de detención. El acusado como organizador del grupo, Matías Álvarez, está también imputado de haber ordenado un atentado contra una mujer imputada. Mientras el debate se lleva a cabo, está siendo investigado por su posible vínculo con amenazas sufridas por fiscales, jueces y autoridades del gobierno municipal. En el juicio interviene el fiscal general Fernando Arrigo. 

Además de Álvarez, los imputados son Luciano Martín Álvarez, Maximiliano Rodríguez González (todos ellos actualmente detenidos), Kevin Fabián Aranda y Daniel Antonio Núñez. El juicio comenzó el 6 de febrero y para su celebración los integrantes del Tribunal N° 2 de Rosario -Osvaldo Facciano, Omar Paulucci y Eugenio Martínez Ferrero- se trasladan a la ciudad de Venado Tuerto y desarrollan las audiencias en la Casa del Bicentenario de la municipalidad local.

El debate había comenzado con el abordaje de tres organizaciones que se dedicaban a la comercialización de sustancias estupefacientes en Venado Tuerto y sus alrededores. Los integrantes de dos de esas organizaciones firmaron acuerdos de juicio abreviado, en los que resultaron condenados y se tuvo por probado el vínculo entre los imputados como parte de una misma organización dedicada al tráfico de estupefacientes, como también la tenencia de sustancias con fines de comercialización en ocho domicilios distintos.

Los cinco acusados que siguen en juicio están señalados como parte de esta maniobra, en la que se les atribuye la tenencia con fines de comercialización del material incautado, entre los que se hallaron 320 gramos de marihuana y 625 de cocaína fraccionados y listos para su venta al menudeo. Además, en los operativos se secuestraron dinero en efectivo en divisa extranjera, teléfonos celulares, balanzas digitales y documentación, además de semillas y plantas de cannabis. Por estos hechos, Matías Álvarez fue señalado como organizador y financista de las maniobras delictivas.

También se atribuyó a Álvarez la tenencia de un revolver calibre 38 especial largo marca Taurus, siete cartuchos intactos calibre 38 marca FM, 32 cartuchos calibre 22 largo, un cargador de ametralladora y municiones calibre 9 mm, y tres cartuchos calibre 16×70 marca GV de color rojo que fueron hallados en su domicilio. Maximiliano Rodríguez González está asimismo acusado de tener en su vivienda un revólver calibre 32 que contenía en su interior dos proyectiles intactos y, junto al arma, dos proyectiles del mismo calibre percutados y una escopeta calibre 16.

En el transcurso de las tareas de investigación y, a partir de las intervenciones telefónicas, surgió que Álvarez, desde su lugar de detención, ordenó disparar contra el domicilio de una mujer imputada en la causa, lo cual pudo constatarse el 29 de noviembre de 2018, después de que el domicilio de aquella sufriese un atentado. Por esa razón, se le atribuye a Álvarez haber ordenado atacar con un arma de fuego a través de terceras personas no individualizadas al domicilio, cuando dos hombres no identificados que se desplazaban en una motocicleta sin dominio colocado ni luces encendidas dispararon contra el vehículo de la víctima y su hogar, para luego fugarse. De acuerdo a la acusación, Álvarez dirigió la operatoria telefónicamente y desde el interior del complejo penitenciario donde se encontraba detenido, además de haber suministrado los elementos necesarios para llevarla a cabo y señalar a su destinataria.

Por otro lado, en los expedientes acumulados se atribuyó a Álvarez el transporte -junto al ya condenado Juan Pablo Ferreyra- de una carga de estupefacientes que fue encontrada cuando ambos se trasladaban en un automóvil Renault 18 conducido por el segundo de ellos. Al momento de ser detenidos en la localidad de Cañada Gómez, se encontró en el interior del vehículo un trozo compacto tipo ladrillo escondido dentro de una mochila, que contenía 770 gramos de cannabis sativa.

Por último, a otro de los acusados, Daniel Antonio Nuñez, se le imputa también haber tenido en su poder 978,9 gramos de marihuana, que le fue secuestrada en su domicilio de Venado Tuerto el 30 de marzo de 2016 durante un procedimiento realizado por el Ministerio Público de la Acusación de la provincia de Santa Fe.(Foto Ilustrativa)