Con una inversión de casi 500 millones de pesos, la provincia se prepara para poner en funcionamiento a fines de septiembre el hospital de Venado Tuerto, el efector público más importante del país y uno de los más modernos de América latina.
Este efector de alta complejidad es uno de los cinco que con las mismas características construye la provincia en cada uno de sus nodos. Los cuatro restantes se ubican en las ciudades de Rosario, Santa Fe, Rafaela y Reconquista, y las obras se encuentran en distintos estados de desarrollo.
El correspondiente a Venado Tuerto, de referencia para la Región 5, se levanta en el predio de avenida Santa Fe y Comandante Espora. Su emplazamiento permite cumplir con los criterios de accesibilidad regional y local, tanto para desplazamientos necesarios dentro de la misma ciudad como por las conexiones con las rutas nacionales 8 y 33.
Una vez habilitado contará con blocks para cirugía, maternidad y neonatología con 18 puestos; diagnóstico y tratamiento con salas de rayos X, tomografía y laboratorio; guardia; consultas externas; rehabilitación e internación con 102 camas.
El sector para el público estará conformado por espacios de circulación, salas de espera, aulas, auditorio, oratorio, dirección y cafetería.
También tendrá un sector de apoyo técnico conformado por la sala de máquinas, vestuarios, depósito de residuos, y áreas de mantenimiento; una sección de apoyos generales compuesto por oficinas, administración, cafetería para el personal y dormitorios para los médicos, así como un sector destinado al estacionamiento de vehículos.