Trenes: tras disolución de Ferrobaires, crecen las dudas sobre ramales del interior

Luego de que se oficializara que la Unidad Ejecutora del Programa Ferroviario bonaerense, Ferrobaires, dejará de existir el 15 de marzo con la consolidación de su traspaso a la órbita nacional, crecieron las dudas sobre los servicios y ramales que nunca se restablecieron desde su suspensión a mediados de 2016.

Los ramales que interconectan localidades y llegan hasta capital federal actualmente cubren unas 50 de localidades de la provincia de Buenos Aires, mientras que dos décadas atrás paraban en unas 140 ciudades y parajes. Si bien los servicios se habían reducido con los años, la situación se agravó a mediados de 2016 cuando el Gobierno provincial decidió cerrar por tiempo indeterminado los servicios de pasajeros de la empresa estatal Ferrobaires.

Actualmente, y luego del traspaso, Trenes Argentinos Operaciones (Sosfe), que depende del Ministerio de Transporte nacional, cubre sólo dos de los siete ramales de larga distancia que antes eran operados por Ferrobaires: Retiro-Junín y Constitución-Bahía Blanca. En tanto, aún no hay noticias sobre el futuro de las conexiones restantes y que incluían a decenas de localidades, sobre todo de los ramales a Tandil y a 25 de Mayo, los cuales estuvieron en funcionamiento hasta 2016.

Desde Transporte dijeron que desde que se inició el traspaso de los servicios provinciales a la órbita nacional, que ejecuta Sosfe, «mejoraron los servicios y las frecuencias de los trenes a Junín, Bahía Blanca y Mar del Plata». Pero ante la consulta sobre los servicios restantes señalaron que «aún están en evaluación».

«Se están evaluando las condiciones del ramal, con foco en la seguridad, que es el eje prioritario de un servicio de transporte de calidad para trenes de pasajeros. Ferrobaires se encontraba en un estado crítico cuando cerró, con un episodio lamentable que fue un accidente cerca de la localidad de Rawson, en junio de 2016. Desde ese momento hicimos un gran esfuerzo para traspasar esa empresa de la órbita provincial a nación,  normalizar esa situación crítica y ofrecer alternativas de movilidad a las localidades del interior bonaerense», señalaron desde el Ministerio.

En ese sentido, ante la incertidumbre por retorno de los servicios del ramal Once–Toay –que incluye Mercedes, Chivlcoy, Bragado, Pehuajó y Trenque Lauquen-, desde el Frente Renovador de Pehuajó realizaron la consulta formal, pero la respuesta no conformó a los vecinos. «La operadora brindará aquellos servicios que puedan correrse en condiciones de seguridad y confort, quedando para una próxima etapa los restantes, cuando ello resulte pertinente», reza la nota firmada por la directora de Asuntos Administrativos Internos de la subsecretaría de Transporte, Pilar Becerra.

Al respecto, el edil massista Pablo Lanik, se quejó porque en la respuesta «no hay ni siquiera una fecha posible prevista» y recordó que pidieron «audiencias reiteradas con el Subsecretario de Transporte Ferroviario para poder plantearle el enorme perjuicio de toda nuestra zona al no contar con este servicio de transporte que es esencial».

 

#QueVuelvaElTren

La consulta popular #QueVuelvaElTren cosechó hasta el momento más de 500 mil votos a favor para que retornen los servicios en el interior de la provincia de Buenos Aires. La iniciativa fue coordinada por la ONG Verificación Informativa y Auditoría Social (VIAS), SUBI, Mo.NA.Fe, Tren Para Todos y La Bordó de Mitre, y los usuarios manifestaron estar de acuerdo con que «se reconstruya el sistema ferroviario nacional y con que vuelva el tren de pasajeros al interior del país y a la provincia de Buenos Aires».

La consulta -que continuará en otros puntos de la provincia- congregó el trabajo que desde hace un año venían realizando en distintas asambleas vecinos de Brandsen, Pigüé, Saavedra, Ranchos, Torquinst, Capitán Sarmiento, Tandil, Laprida, Pringles, y Sierra de la Ventana, entre otros, afectados por la ausencia de ramales que conecten estaciones.

Es que los vecinos autoconvocados por la vuelta del tren temen que los ramales dejen de funcionar para siempre y denuncian «la destrucción de la política ferroviaria argentina», al tiempo que advierten que «son más de un centenar los pueblos en riesgo de desaparecer», debido a que los trenes que hoy atraviesan el territorio paran, en su mayoría, en estaciones ubicadas en ciudades cabeceras o importantes y no en los pequeños pueblos.

«Nos preocupa que se trate de una decisión política, el impacto sobre los pueblos del interior es enorme, la gente quiere la vuelta del tren», dijo a DIB, Víctor Amarilla de la Coordinadora por la Vuelta del Tren y miembro de la mesa nacional de Salvemos el Tren. En ese sentido, señaló que es una «excusa» que las condiciones de las vías son malas», porque según sostuvo continúan pasando por allí varios trenes cargueros por día.

 

Preocupación por los puestos de trabajo

Ferrobaires tenía unos 2 mil empleados entre maquinistas, señaleros, personal obrero y administrativos, quienes esperan con incertidumbre el traspaso de sus puestos de trabajo a la órbita nacional. Desde la Asociación del Personal de Dirección de Ferrocarriles (APDFA) dijeron a DIB que «hasta el momento sólo se reubicó al 40% del personal» de la exempresa estatal, y que los trabajadores restantes «mantienen la incertidumbre sobre su situación laboral».

«Estamos exigiendo que antes del 15 de marzo sea transferido el personal que falta. Pero no hay seguridad de que esto suceda, la situación es complicada porque la Unidad Operatoria de Transferencia (UOT) que se creó para el traspaso ya se disolvió», dijo a esta agencia Hugo González, trabajador de Ferrobaires y prosecretario gremial de APDFA. (DIB)