(Por Marien Chaluf, de la redacción de DIB).- Fue el último ministro de Salud de la presidencia de Cristina Fernández de Kirchner y ahora el elegido por Axel Kicillof para estar al frente de la cartera bonaerense. A un mes del inicio de su gestión, Daniel Gollan realizó un duro diagnóstico sobre la «herencia» sanitaria en la provincia.
En medio del brote de sarampión y de la multiplicación de casos de sífilis, apuntó contra la gestión de María Eugenia Vidal, y dijo que se investiga si se falsearon datos en reportes y registros.
En una entrevista con DIB, sostuvo que «faltan profesionales» en todos los centros de atención, y reconoció que la incorporación será paulatina por la situación de crisis y emergencia. Su posición acerca de la legalización de la marihuana y el autocultivo para el cannabis medicinal.
Usted habló de grandes deudas con proveedores. En este primer mes de gestión, ¿pudieron afrontar los pagos?
Nos hemos reunido con todos los proveedores y estamos logrando levantar los servicios que estaban caídos por falta de pago, mientras rediseñamos el pago de lo adeudado. Algunos proveedores y prestadores no cobraban desde mayo. En el Ministerio encontramos una deuda de $ 6.000 millones y en el IOMA de más de $ 6.500 millones. Además, el Incluir Salud, que es un programa nacional, también tiene una gran deuda con prestadores que alcanza los 1.800 millones de pesos. En global, entre IOMA, el Ministerio e Incluir Salud son unos $ 14.000 millones de deuda, en medio de una situación financiera muy comprometida.
Estamos ante un brote de sarampión con la mayoría de los casos en la provincia. ¿Qué se podría haber hecho y no se hizo para frenarlo?
Vacunar rápidamente a todos los chicos de 6 a 11 meses, que no se hizo porque no había dosis. Pero al mismo tiempo encontramos en nuestro depósito de Melchor Romero unas 162 mil vacunas para desechar, vencidas, sin cadena de frío. Se fracasó en toda la línea. Tenemos la fuerte sospecha de que se falsearon estadísticas y de que se ocultó información. Hace más de dos años en la provincia se empezó a negar a los trabajadores que estaban en el área de estadísticas de los municipios o de las regiones sanitarias los datos de los niveles superiores. Esto es extraño porque en epidemiología se necesita constantemente cotejar datos. Esas cosas se hacen cuando se quiere manipular, falsear la información. Mandaron una estadística que afirmaba que la cobertura de la Triple Viral era de 99,4%. Si esto fuera así, cómo puede haber sarampión entonces en el grupo etario que tiene que estar vacunado. Además, ni en los países más desarrollados existe ese nivel de cobertura, y todo eso en medio de las denuncias por faltante de vacunas. Los datos no cierran.
¿Cómo pueden conocerse entonces los «números reales»?
Vamos a iniciar una investigación con los municipios y las regiones sanitarias. Tenemos que revisar muchas cuestiones que nos generan fuerte sospecha con respecto a cómo se manejaron los datos. Por ejemplo, mientras el exsecretario de Salud (Adolfo Rubinstein) hablaba de récord de controles de embarazo, uno veía que la sífilis congénita aumentaba en un 500%, cuando en el marco de esos controles se hace la prueba VDRL para el diagnóstico de la enfermedad. La sífilis aumentó en un 400%, es récord, y eso tiene que ver con que no había preservativos, con que se desarmó el ESI (programa de Educación Sexual Integral) y con que se desintegraron todos los equipos de acción territorial. Acá no hay casualidades, hay causalidades. No compraban preservativos. Todo fue a menos.