Asumieron en sus municipios en 2003, cuando Néstor Kirchner llegaba a la Presidencia en medio de una crisis que tenía sus coletazos sobre la sociedad. Actualmente siguen de manera ininterrumpida en el cargo y cumplirán, al terminar este nuevo período 20 años en el poder. Elegidos y reelegidos en las urnas, son siete los intendentes que se retirarán invictos y tendrán, de cara a 2023, la difícil tarea de buscar un sucesor, una jugada que muchas veces no suele salir bien.
Ricardo Casi, uno que se fue y volvió
Es intendente de la ciudad de Colón desde 2003, Ricardo «Pito» Casi es un dirigente que conoce bien el municipio por su perfil de cercanía con la sociedad que le valió, según la consultora GACH, estar este año entre las diez mejores gestiones comunales. De hecho en 2009, a causa de la pandemia de Gripe A que azotaba la zona, pidió licencia para sumarse al equipo médico y ayudar a combatirla.
Crítico sobre las gestiones de Mauricio Macri y María Eugenia Vidal, de quien denunció discriminación por los fondos, cosechó en octubre el 60% de los votos, 24 puntos más que el candidato de Juntos por el Cambio. En 2015 supo trabajar para la candidatura de Florencio Randazzo, aunque dos años después, tras los magros resultados, volvió al kirchnerismo para apoyar a Cristina Fernández.
Mario Secco, un K de siempre
El intendente, Mario Secco, hizo de Ensenada no sólo un distrito pujante sino uno inexpugnable para el kirchnerismo: en las elecciones de octubre cosechó más del 70% de los votos, todo un récord. Fue secretario general de los Municipales de esa localidad y durante los años 90 supo enfrentar una dura resistencia al ajuste de Carlos Menem. Desde 2003 gobierna Ensenada al derrotar ese año al entonces intendente peronista Adalberto Del Negro.
Siempre defensor del kirchnerismo, aún después de la derrota de 2015, durante estos últimos cuatro años, tuvo un fuerte enfrentamiento con la gobernadora María Eugenia Vidal por fondos de coparticipación y hasta la denunció por discriminar a esa comuna cercana a La Plata. Hace pocas horas entregó un bono de $ 32.000 a los municipales.
Ricardo Curutchet, un aliancista ganador
Ricardo Curutchet llegó a la intendencia de Marcos Paz en 2003, mediante una alianza de varios partidos que nuclea a la UCR, de la que es originario, el Frente Grande, sectores del justicialismo, el kichnerismo, Encuentro Popular, sectores independientes, vecinalistas y progresistas.
Agrimensor, docente en matemáticas e hincha de Boca, consiguió en su quinta elección el 58,4% en este distrito de la primera sección electoral. Expulsado en 2015 del radicalismo por saltar al kirchnerismo, de los catorce funcionarios directos que dependen del Ejecutivo local, once son mujeres. «Con Alberto Fernández, estamos desde 2003, cuando empezamos la gestión», recuerda al festejar el triunfo del Frente de Todos.
Héctor Olivera, al frente de 2.000 habitantes
Si bien fue elegido en las urnas en 2003, desde un año anterior Héctor Olivera se hizo cargo del municipio de Tordillo, un distrito de unos 2.000 habitantes, un año antes por el fallecimiento del entonces jefe comunal Agustín Monge.
Hincha de River y congresal nacional del peronismo, nació en Dolores en 1971, y se impuso en las elecciones de octubre por casi el 60% de los sufragios. Crítico de la gestión de María Eugenia Vidal, antes de ser elegido Axel Kicillof como candidato se había inclinado por la figura de Martín Insaurralde.
Gustavo Walker, en nombre del pueblo
«Vuelvo a ser candidato porque el pueblo me lo pide», dijo a mediados de este año Gustavo Walker, a quien octubre le dio la razón. El pueblo de Pila, de unos 2.500 habitantes, lo eligió por quinta vez. En esta oportunidad con el 64% de los votos.
El jefe comunal que sigue invicto en las urnas cuestionó más de una vez al presidente Mauricio Macri y la gobernadora María Eugenia Vidal. «Están hundiendo en la miseria a la gente», lanzó en plena campaña.
Miguel Lunghi, un radical con buen diálogo
Afiliado radical desde los 18 años pero con muy buena relación con todos los gobernadores, Miguel Lunghi asume su quinto mandato en la ciudad de Tandil consecutivo a sus 76 años. Este médico pediatra, que en agosto tuvo que enfrentar una interna dentro de Juntos por el cambio, ganó con el 54% en octubre.
Según el ranking de gestión, transparencia y calidad de vida de la consultora GACH, Lunghi está entre los diez mejores intendentes de la provincia. Para este nuevo período, y último, el jefe comunal se aferró a su círculo cercano para definir el Gabinete que lo acompañará. De hecho Miguel Lunghi (hijo) tendrá un rol más protagónico al quedar al frente de la Secretaría de Gobierno.
Carlos Sánchez, un vecinalista fuerte
Nacido en Tres Arroyos y productor agropecuario durante casi 30 años, Carlos Sánchez es otro de los intendentes que fue reelegido en octubre y que completará en 2023 dos décadas al frente del poder local.
De la mano Movimiento Vecinal y pese a tomar distancia de su fundador, Carlos Aprile, supo fortalecer el poder en este distrito agrícola. Con el 44% de los votos, derroto en octubre al frente de Todos y a Juntos por el Cambio. Por su perfil, siempre buscó tender lazos con los partidos que gobernaron la provincia y la nación, y según dijo a su equipo espera encontrar en Fernández y Kicillof más respuestas que las que cosechó con Macri y Vidal.(DIB)