La Provincia de Buenos Aires avanzará en las próximas semanas en la definición de un nuevo aumento en las tarifas eléctricas, que podría comenzar a aplicarse en enero o en febrero de 2018, y que será, como mínimo, de un 20%.
El Gobierno convocó, a través del Organismo de Control de Energía Eléctrica (Oceba), a una audiencia pública que se celebrará el 12 de diciembre próximo en la localidad de Olavarría.
Allí, según el pliego del llamado, se informará “el impacto que tendrá sobre los montos de facturación en las distintas categorías de usuarios las medidas que el Ministerio de Energía y Minería implementará con relación a los precios del Mercado Eléctrico Mayorista y al retiro de subsidios del transporte de energía eléctrica”.
La convocatoria hace referencia a la audiencia pública convocada por Energía para el próximo 17 de noviembre, donde definirá el aumento del precio mayorista de la electricidad, con la consecuente quita de subsidios. Esto provocará, según estimaciones preliminares, un incremento no menor al 40% para las tarifas de Edenor y Edesur, empresas que prestan servicio en el área metropolitana bajo jurisdicción nacional.
En el caso de la provincia, en la audiencia de diciembre se informará cuál será el impacto directo del aumento mayorista en las tarifas de las cuatro grandes prestatarias bonaerenses (Eden, Edes, Edelap y Edea) y las más de 200 cooperativas del interior. Pero desde el Gobierno no descartan autorizar en este trámite un incremento en el tramo bonaerense del costo eléctrico, relacionado con el transporte y la producción.
En este punto, la Provincia podría autorizar el incremento del 10% autorizado en mayo pasado para aplicarse a partir del 1° de diciembre, pero que decidió postergar. Ese aumento, no obstante, estaba atado al cumplimiento de unas metas de inversión, que las empresas todavía no rindieron.
Según las estimaciones preliminares, el aumento no sería menor al 20% y no se aplicaría antes de enero o febrero del año próximo, habida cuenta de las demoras que suele tener el circuito administrativo de estas autorizaciones. No obstante, las prestadoras presionarán para que las subas se permitan cuanto antes, habida cuenta que se espera que el nuevo precio mayorista podría correr desde enero.
Las tarifas eléctricas de la provincia tienen tres componentes: el precio mayorista (asignado a la generación eléctrica, a cargo de la empresa estatal Cammesa), y el valor agregado de distribución (VAD), que incluye el transporte, comercialización y mantenimiento de líneas, y cuyo monto es asignado por la Provincia.
En las audiencias públicas anteriores, el Gobierno bonaerense propuso aumentos tarifarios basados en estas dos variables. El último incremento, aprobado en mayo pero cobrado de forma plena en agosto, fue del 58%. En el mismo trámite se fijó una suba del 10% a partir de diciembre, que el Gobierno aún no autorizó y podría sumarse a partir de la próxima suba. (DIB)