Cada día parece que se vuelve peor, insano, riesgoso. Ya pedir una identificación, demorar a alguien en un control, es una tarea cada vez más peligrosa para las fuerzas policiales que deben lidiar con gente que se torna irascible e intolerante ante cualquier requisitoria y que de un simple trámite terminan cometiendo delitos y agresiones sin sentido. Ya el fin de semana habíamos comentado en estas páginas cómo dos menores, al ser demorados en un control vehicular, atacaron a los policías, y uno de ellos, de 16 años, gatilló dos veces sobre uno de los oficiales, pero por suerte el ama no disparó.
Ayer la víctima fue una efectivo del Comando de Patrulla. El hecho ocurrió cerca de las 8.10, cuando personal del Comando de Patrulla, en Lavalle a la altura del 400, aproximadamente, vio a una joven que deambulaba en actitud sospechosa y como prevención se detuvieron a pedirle la identificación.
La sindicada, de 25 años de edad, se negó a ser identificada y comenzó a insultar a la efectivo actuante. Es de tener en cuenta que al tratarse de una mujer quienes deben intervenir, generalmente, son oficiales del mismo sexo.
La agente se vio sorprendida cuando esta la empezó a golpear a patadas, haciéndola perder el equilibrio mientras que la mujer, totalmente fuera de sí, la continuó pateando en el pecho. Finalmente la agresora fue reducida y trasladada a sede de la Comisaría Primera, donde se le iniciaron actuaciones por resistencia a la autoridad y lesiones.
Por suerte, la policía agredida terminó con tan solo lesiones leves, pero debiendo guardar reposo para su recuperación.(El Norte)