Dos empleadas de la comuna de Ricardone sufrieron heridas, ninguna de ellas graves, provocadas por un camión que eludió un control sanitario en la ruta nacional A-012, derribó el sistema rociador de desinfección y se dio a la fuga. Un inspector lo siguió durante cuatro kilómetros pero debió detenerse porque el camionero lo amenazó con tirarle el vehículo encima.
El violento episodio se registró el martes, a las 19, a la altura de la calle Islas Malvinas de esa localidad, ubicada a unos 30 kilómetros al norte de Rosario. El puesto de control que terminó dañado fue montado por las autoridades locales para realizar operativos sanitarios de prevención de contagios de Covid-19.
Personal de la comuna y de la Guardia Urbana estaban haciendo los controles de rutina cuando el chofer de un camión Fiat Iveco con acoplado hizo caso omiso a la indicación de detenerse y siguió su marcha arrasando los caños que sostenían el arco rociador de desinfección de vehículos.
A partir de esa peligrosa maniobra sufrieron lesiones dos empleadas, de 41 y 45 años, respectivamente, quienes debieron ser asistidas por médicos del lugar.
El camión fue identificado y la Fiscalía de San Lorenzo ordenó la captura del conductor.
El presidente comunal de Ricardone, Juan Carlos Doria, relatóel episodio, con «mucha bronca y tristeza». Dijo que el pesado rodado «venía a alta velocidad por el centro del pueblo, se llevó el arco por delante con el acoplado, encaró al inspector de tránsito y terminaron golpeados dos empleadas, una de la comuna y otra de la Guardia Urbana, que estaban haciendo los test de olfato».(La Capital)