El ministro de Salud Mario Russo renunció a su cargo en el Gobierno Nacional debido
a motivos “estrictamente personales”, y en su lugar fue confirmado Mario Lugones.
Según fuentes de la Casa Rosada el ex titular de la cartera sanitaria “se va por cuestiones personales”, y no porque el mandatario lo haya echado. Sin embargo, algunas versiones hablan de una interna ya que Russo había pedido este jueves por nota ante la Jefatura de Gabinete la “limitación de funciones” de María Cecilia Loccisano, secretaria de Gestión Administrativa del ministerio.
La gestión de Russo duró unos 10 meses y tuvo uno de sus momentos más álgidos con la histórica epidemia de dengue en el último verano. Actualmente era criticado por algunas provincias por la falta de acción en ese sentido y debía encarar una campaña por el dengue con pocas vacunas compradas.
Pocos minutos después de conocerse la salida de Russo, el Gobierno confirmó a Lugones en su lugar, mediante un comunicado, según el cual el flamante funcionario “llevará al ministerio su extensa experiencia en el ámbito de la Salud, habiendo estado a cargo del Sanatorio Güemes, enfocado en la docencia médica y la investigación clínica”.
“El Dr. Mario Lugones asumirá el cargo en su reemplazo, llevando al Ministerio su extensa experiencia en el ámbito de la salud, habiendo estado a cargo del Sanatorio Güemes y habiendo sido fundador y presidente de la Fundación Güemes, enfocada en la docencia médica y la investigación clínica”, publicó la Oficina del Presidente.
El texto sumó en antecedentes del nuevo ministro. “A lo largo de su carrera, fue jefe de clínica de la Unidad Coronaria del Sanatorio Güemes, además de médico cardiólogo de Praxis Médica, de la Fundación Favaloro, del Sanatorio Malvinas, entre otros. A su vez, se desempeñó como Director del Instituto Médico de la Seguridad Social y Evaluación Tecnológica (IMSSET) de la Facultad de Medicina de la UBA y fue Director de la Maestría de Gerenciamiento de Sistemas de Salud de la UBA”, detallaron sobre Lugones.
Lo que no dice el texto oficial es que el médico ahora ministro ya tenía injerencia en el Gobierno, ya que era consultado desde la gestión del exjefe de Gabinete Nicolás Posse y tras su salida cerró filas con Santiago Caputo. Es que su hijo, Rodrigo Lugones, es un influyente consultor y socio del asesor estrella de Javier Milei. (DIB)