Ramallo: Secuestran 382 kilos de cocaína

El procedimiento donde se secuestraron 382 kilos de cocaína estuvo a cargo de personal de Gendarmería Nacional y se llevó adelante en la autopista frente a Ramallo. Esta información tomó estado público el último domingo –así lo reflejó el diario La Capital de Rosario–, pero el operativo se produjo el pasado jueves en el marco de una investigación de vieja data que venían realizando fuerzas nacionales.

Los casi 400 kilos de cocaína que habían sido cargados en una quinta de Ybarlucea, al parecer tenía como destino Europa, y una de las detenidas fue una mujer que era investigada como presunta líder de una organización salteña que abastecía al clan Loza y traficaba droga desde Bolivia y Perú hacia España.El procedimiento basado en una investigación de la Procuraduría de Narcocriminalidad (Procunar) fue realizado la noche del jueves, pero se difundió recién el sábado y con información por demás de imprecisa, teniendo en cuenta su envergadura. De hecho, circuló una primera versión que indicaba que se había realizado en una finca de Ybarlucea y luego se rectificó; según fuentes judiciales, la droga fue cargada en Ybarlucea en tres vehículos que fueron interceptados en la autopista.
                            Investigada
Según confirmaron fuentes de la Procunar, Adelaida Castillo –la mujer sindicada como líder de la banda– venía siendo investigada desde hace un tiempo como posible proveedora de narcos que exportaban droga a España. Entre ellos el llamado Clan Loza, cuyos cabecillas fueron capturados en 2017 por el transporte de 1160 kilos de cocaína a Europa.
En 2019 uno de sus líderes, Valdemar Loza, fue condenado junto con otras tres personas a penas de entre 7 y 15 años de cárcel mientras que Erwin y Juan esperan que se disponga la fecha para ser enjuiciados.En ese marco, Castillo venía siendo investigada por la Procunar desde 2019. Para la tarde del jueves pasado efectivos del Escuadrón de Operaciones Antidroga de Gendarmería vieron ingresar tres camionetas en una quinta de Ybarlucea. En una de ellas iba Castillo.
El seguimiento dio origen a una orden del juez federal de Salta Julio Bavio para interceptar la marcha de las camionetas. Ese operativo tuvo lugar en la autopista, a la altura de Ramallo. En uno de los vehículos de las camionetas, conducido por la propia Castillo, se hallaron trece bultos con unos 25 kilos de cocaína. En total se contaron 382 kilos de esa droga cuyo valor, según fuentes cercanas a la investigación, se estima en alrededor de 300 millones de pesos.Resultó muy llamativo para los investigadores que la mujer de 58 años haya estado al volante de uno de los vehículos en lugar de organizar y monitorear la operación a distancia, como suelen hacer los jefes narcos. Al parecer, la operación era muy importante y había sufrido complicaciones que la obligaron a involucrarse más de lo habitual y eso derivó en su caída.
                              La historia de Adelaida
En otro tramo del informe se menciona que fuentes de la Procunar situaron los orígenes de Adelaida Castillo como organizadora de bagayeros que contrabandeaban mercadería en el norte salteño. Así comenzó a formar a personas que luego se desarrollaron como narcotraficantes, actividad a la que se volcó de lleno a partir del 2000.Su vínculo con Loza fue detectado en diciembre de 2017 cuando el referido clan fue desbaratado en allanamientos en los que se secuestró más de una tonelada de cocaína. En uno de ellos, en un galpón de la localidad bonaerense de Villa Madero, se hallaron 860 kilos en una camioneta que usaba Valdemar y estaba a nombre de Adelaida.Según los informantes, el clan Loza tuvo su apogeo entre 2008 y 2018 como transportadores de droga de Bolivia y Perú que se enviaba, previo paso por Salta, a Europa. En general en cargas que llegaban a España para luego distribuirse a Italia, Irlanda e Inglaterra. Una vez ubicada la droga, los Loza contrabandeaban las divisas europeas y la lavaban en Argentina.La caída de Loza no dejó inactiva a Castillo, que siguió liderando una de las organizaciones narco más importantes que traían cocaína desde Bolivia, desde donde la enviaban en avioneta a Santa Fe o Buenos Aires para luego llevarlas hasta su destino europeo.(LA CAPITAL. EL NORTE)