La presentación que los intendentes del peronismo junto a la ONG CEPIS llevarán a la Justicia para anular los últimos aumentos de tarifas eléctricas autorizados por el gobierno de María Eugenia Vidal revela en su exacta medida el cóctel brutal que se aplicó sobre la ciudadanía: las boletas se dispararon hasta 5 mil por ciento, junto a las ganancias de las distribuidoras, mientras los sueldos se mantuvieron planchados.
Los datos, a los que accedió desde fuentes partidarias, hablan por sí solos: una familia platense que en diciembre de 2015 consumía 350 kw/h por factura, pagaba por el servicio menos de 47 pesos.
Tres años después, el mismo consumo cuesta 2.700 pesos, un 5.600 por ciento más. Increíblemente, para un usuario electrointensivo, con consumos de 700 kw/h, el cambio fue menos drástico: pasó de pagar 221 pesos a 6.700, es decir un 2.900 por ciento más. Una PYME industrial, a la que se le asigna un consumo promedio de 3.000 kw/h, pagaba en 2015 825 pesos y hoy abona 3.500 por ciento más: hasta 30 mil pesos por boleta de luz.(INFOCIELO)