El gobierno bonaerense acordó junto con representantes del campo la creación de un espacio para analizar las políticas impositivas hacia el sector y prometió revisar con universidades y representantes de la ciencia una solución definitiva para la gestión de agroquímicos.
El Ministro de Desarrollo Agrario, Javier Rodríguez, recibió hoy a representantes de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap), con quienes acordó crear una mesa técnico-impositiva, que incluirá a la Ley del Sudoeste.
El ministro bonaerense, quien había sostenido que las asambleas del campo estaban «fuertemente politizadas», recibió por primera vez de forma oficial a Carbap, una de las entidades más críticas a las políticas agropecuarias del kirchnerismo.
En el encuentro también se abordó el problema de los agroquímicos, cuya regulación en la provincia está suspendida desde el año pasado. Según informó Rodríguez, para analizar el tema «se formará una mesa técnico-científico que estará integrada por representantes de la ciencia y las universidades para luego abrirla a distintas instituciones y se genere un intercambio de opiniones que lleve a una solución definitiva».
De esta forma, la Provincia consolidó su idea de terminar con la dinámica de encuentros de la Mesa Agropecuaria bonaerense. Fuentes oficiales aseguraron que en esos espacios «no se terminaba resolviendo nada», y anticiparon que el nuevo formato de encuentros promoverá el debate de mesas temáticas para analizar la problemática de cada sector en particular.
También se puso en agenda la inseguridad en el campo, y los productores pidieron la continuidad de las patrullas rurales. En ese marco, el ministro agregó que «vamos a tener un encuentro en conjunto con el Ministerio de Seguridad, donde se va recibir a las entidades para definir un plan en el corto plazo». Finalmente, el ministro adelantó que se analiza impulsar una línea de créditos para la producción.
«El diálogo y trabajo en conjunto son las herramientas que tenemos que utilizar en estos próximos años para encontrar las soluciones que demanda la actividad agropecuaria», señaló Rodríguez, al tiempo que sostuvo que «se coincidió en la necesidad de tener un Estado más presente que se caracterice por dar respuesta inmediata y que lleve adelante una política más ágil y austera, con la responsabilidad de impulsar la producción y el trabajo que necesita el sector». (DIB)