Ocho de cada 10 argentinos reemplazaron las primeras marcas por otras alternativas, mientras que la mayoría redujo las salidas por entretenimientos o comidas fuera del hogar, y el consumo de gaseosas, carne vacuna, postres lácteos y hasta cerveza.
Los datos surgen de distintas mediciones que las consultoras D’Alessio IROL y Berensztein realizaron en el segundo semestre del año 2018 y el mes de enero de 2019, basadas en más de 1.000 encuestas online, a personas mayores de 18 años en todo el país.
El primero de los datos señala que “8 de cada 10 personas reemplazaron a las primeras marcas por otras alternativas de menor precio” y que “la sustitución abarca entre un 20% y un 60% de los productos consumidos”.
Pero además menciona los “consumos abandonados”, y en ese punto señala que el 48% dejó de pagarle a sus hijos apoyo escolar y el 33% redujo actividades extracurriculares de sus hijos.
En tanto que el 32% de los consultados abandonó las salidas por entretenimiento, como cine o teatro, y el 30% dejó de salir a comer a restaurantes y pizzerías, entre otros.
En la mesa, por la crisis, se redujo un 71% el consumo de gaseosas, un 69% la carne vacuna, 67% postres lácteos, 66% cerveza y 59% pescado, siempre según la encuesta.
Asimismo señala que las carnes, por su alto costo, están siendo reemplazadas por arroz, en un 41% de los casos, fideos en un 40%, pollo un 36%, verduras 35% y frutas en un 31%.
Finalmente asegura que hay un sector de los denominados consumibles que resiste: Internet, medicamentos, cable, telefonía celular y streaming como Netflix o Spotify, se mantienen peses a los altos costos(La Tecla)