Pergamino: Un padre solicita la detención del presunto violador de sus dos hijas de 12 y 13 años

Un padre y su actual pareja se encuentran atravesando momentos de mucha angustia, bronca e impotencia, luego que según ellos mismos relatarán , las pequeñas hijas del joven fueron abusadas por un sujeto de 58 años que desde hace dos décadas se encuentra en pareja con la abuela paterna de las menores.

A pesar que la Justicia se encuentra trabajando desde el momento mismo que se realizó la denuncia en la Comisaría de la Mujer y la Familia (11 de marzo de este año), los tiempos no suelen en muchas oportunidades los esperados por las víctimas.

El fiscal Nelson Mastorchio, titular de la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio Nº 3, junto a su grupo de tareas, sumado al equipo de psicología y contención a las víctimas del Ministerio Público Fiscal, se encuentran en la fase final de la investigación que podría determinar en la detención del único imputado en tan repudiable suceso.

                Palabra del padre

El papá de las pequeñas y parte de su familia aseguraron ante este medio que los lamentables episodios se registraron desde que las chicas de 12 y 13 años eran todavía más chicas (por lo menos durante cinco años a esta fecha) y siempre en una vivienda ubicada en Macacha Güemes de nuestra ciudad, vivienda que comparte la abuela de las chicas y su pareja, apodado «Chelín» de 58 años.

Según el relato de Leandro, sus hijas los fines de semana visitaban la vivienda ubicada en el barrio Jorge Newbery y la pareja de su abuela desde hace 20 años, las sometía sexualmente.

Además, el joven indicó que su pareja actual se dio cuenta que algo ocurría con las niñas al observar que una de ellas tenía una marca en la nalga. La jovencita comenzó a dialogar con las chicas y, primero la mayor y horas más tarde la menor, relataron lo que padecían en la casa de su abuela. En ese mismo momento los mayores decidieron realizar la denuncia en la sede de la Comisaría de la Mujer y la Familia de Pergamino, lugar donde ellos mismos cuentan que fueron atendidos de excelente manera.

Luego la Fiscalía interviniente activó los protocolos lógicos en este tipo de eventos y las niñas recibieron asistencia psicológica y médica. Ambas fueron revisadas por profesionales de la salud y los denunciantes indicaron que se comprobó que las menores presentaban signos de abuso.

Días más tarde, el viernes 8 de este mes, las pequeñas estuvieron en la Cámara Gesell y su padre indicó que ambos relatos fueron coincidentes y aprobados por los especialistas que tuvieron a su cargo escuchar a las víctimas.

Leandro denunció que está siendo amenazado por algunos integrantes de su propia familia y que espera que la Justicia pueda rápidamente darle una respuesta a su pedido.

«Tienen todas las pruebas, a mí y a mis hijas nos arruinaron la vida para siempre, ahora esta basura deberá pagar por lo que hizo. Queremos vivir en paz, pedimos justicia y que las nenas puedan volver a su vida normal. Hoy tengo miedo a que salgan de mi casa».(CREDITO  LA OPINION)