Pergamino: un jubilado pagó 40.000 dólares por un rescate en un secuestro virtual

Un jubilado de 78 años sufrió en las últimas horas un secuestro virtual en la localidad de Urquiza en el partido de Pergamino en el que pagó un rescate de 40.000 dólares, es decir más de 11 millones de pesos, informaron fuentes policiales.

El hecho de inseguridad bajo la modalidad cuento del tío sucedió este lunes a la madrugada cuando el hombre de 78 años atendió un llamado telefónico en su domicilio de calle San Luis al 600.

El llamante, de manera intimidante, le dijo al jubilado que tenía secuestrado al hijo y que si no pagaba el rescate no lo iba a ver con vida nunca más.

El hombre cayó en el engaño y juntó todos los dólares que tenía en la vivienda, 40.000, los puso en una bolsa y los dejó en la vereda como le indicó el delincuente.

Poco después el dinero desapareció y el jubilado llamó a su hijo para ver cómo se encontraba. Ahí advirtió que su hijo había estado siempre sano y salvo.

El jubilado radicó la denuncia del secuestro virtual en el Destacamento policial de Urquiza y junto a integrantes de la DDI de Pergamino se comenzó con una investigación.

Los detectives analizan las cámaras de seguridad tanto particular como municipales con el objetivo de identificar a los delincuentes, además de investigar el registro de la llamada por la que se cometió el delito.

Personas de la tercera edad son las más elegidas como víctimas de los secuestros virtuales. Ayer, InfoCielo informó que una jubilada sufrió un hecho similar en su casa de la localidad de Carapachay en el partido de Vicente López y perdió una millonaria suma.

Todo pasó el jueves último cerca de las 21 cuando la mujer atendió un llamado telefónico en su domicilio ubicado en la calle Fray Mamerto Esqiuu al 2800.

La jubilada, identificada oficialmente como Teresa V., explicó que una voz femenina se hizo pasar por una de sus hijas y que le dijo que había sido secuestrada.

“Mamá me robaron. Estoy secuestrada. Me tienen acá. Juntá todo lo que tenés”, indicó la estafadora a Teresa.

La damnificada juntó todo el efectivo que tenía en la vivienda, 4.000 dólares y 430.000 pesos, y obedeció a la presunta hija: metió todo en una bolsa de nylon y la dejó en la vía pública.

Poco después, la bolsa con el dinero desapareció y la jubilada se dio cuenta un rato más tarde que había sido engañada, luego de comunicarse con su hija y verificar que nunca había estado en manos de ladrones.

Crédito: InfoCielo