Para evitar el traslado de los testigos a Rosario y garantizar la presencia del público en la ciudad donde ocurrieron parte de los hechos de la causa, la Unidad Fiscal gestionó ante la UNNOBA el uso de un recinto de esa institución.
Con los miembros del Tribunal Oral en lo Criminal Federal N°2 de Rosario reunidos en su recinto de esa ciudad y la fiscalía con los testigos en el Consejo Superior de la sede “Pegamino” de la Universidad Nacional del Noroeste (UNNOBA), continuó por medios remotos el juicio oral y público en el marco de la megacausa “Saint Amant IV”, en el que se juzgan crímenes de lesa humanidad cometidos en el norte de la provincia de Buenos Aires durante la última dictadura cívico militar. La modalidad permitió que el público y los testigos que residen en esa zona de la provincia de Buenos Aires pudieran participar del juicio sin trasladarse a Rosario, un reclamo que el Ministerio Público Fiscal venía realizando desde antes del inicio del debate.
En efecto, el fiscal general a cargo de la Unidad de Asistencia para causas por violaciones a los Derechos Humanos durante el periodo de terrorismo de Estado para la jurisdicción Rosario, Adolfo Villatte, y el secretario letrado de la Procuración General de la Nación y auxiliar fiscal de esa unidad, Juan Patricio Murray, se constituyeron en la sede “Pergamino” de la UNNOBA, mientras que los jueces Román Lanzón y Eduardo Rodriguez Da Crus y la jueza Elena Beatriz Dilario intervinieron desde su asiento natural en la sala de audiencias de la ciudad de Rosario.
Desde el Consejo Superior de la casa de altos estudios, los representantes del Ministerio Público Fiscal y los apoderados de las querellas de la Comisión Provincial por la Memoria -Gabriel Ganón- y de la Subsecretaría de Derechos Humanos de la provincia de Buenos Aires – Rodrigo Cano y Sebastián Metz- interrogaron a los testigos, todos oriundos de la localidad de Pergamino, de manera presencial. La conexión a la audiencia, desde allí, fue de manera remota, a través de la plataforma Zoom.
En la audiencia se recibió testimonio a víctimas y familiares de la represión en el área militar 132 -que estuvo a cargo del Batallón de Ingenieros N°101 de San Nicolás-, quienes también expresaron su conformidad y beneplácito con la decisión de la fiscalía de trasladarse hasta el lugar de los hechos para concretar esas medidas.
El 18 de junio y el 2 de Julio próximos continuará la toma de declaraciones testimoniales de personas que fueron víctimas de la represión en la ciudad de Pergamino, principalmente exempleados y profesionales del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) cesanteados durante la última Dictadura cívico-militar. El público podrá presenciar la audiencia desde el auditorio de la UNNOBA dispuesto por las autoridades de esa casa de altos estudios al efecto.
La fiscalía destacó la imprescindible colaboración de las autoridades de la UNNOBA, cuyo rector Guillermo Tamarit y su secretario de Legal y Técnica, Carlos Pérez, dispusieron todos los medios necesarios para el desarrollo de la audiencia.
También estuvieron presentes en esa sede el secretario ejecutivo y la directora general de la Comisión Provincial por la Memoria, Roberto Cipriano García y Sandra Raggio, y la directora provincial de Programas Sociocomunitarios en Derechos Humanos de la Subsecretaría de Derechos Humanos bonaerense, Marina Vega, quienes expresaron su apoyo a esta iniciativa del Ministerio Público y prestaron valiosos aportes.