En un giro inesperado de acontecimientos, Pergamino se vio envuelto en un escenario de inquietud y preocupación durante la noche del jueves, cuando las sombras del anochecer revelaron movimientos sospechosos cerca de supermercados de origen chino en la periferia urbana. La ciudad, conocida por su tranquilidad, fue sacudida por estos audaces intentos de saqueo que, por suerte, encontraron resistencia por parte de las autoridades locales.
El intendente de Pergamino, Javier Martínez, quien ha estado a la vanguardia de la respuesta, compartió con LA NACION los detalles de los incidentes. Según Martínez, la policía detectó la presencia de un grupo de entre 40 y 50 jóvenes cerca del supermercado chino «Ultramar«, desencadenando una rápida y coordinada respuesta. El alcalde explicó que se activó una alarma preestablecida en colaboración con la Cámara de Comercio local, lo que permitió a las fuerzas del orden cerrar preventivamente el supermercado para evitar cualquier posible altercado. Sin embargo, este caso en particular no fue el único; el intendente señaló que existe la posibilidad de que el mismo grupo hubiera intentado desplazarse hacia otros establecimientos de la zona.
El supermercado «El Paisano» también fue el escenario de un intento similar, con alrededor de 30 personas involucradas. La subcomisaria Myriam Masciotta informó a Diario Núcleo que se trataba en su mayoría de menores, quienes demostraron persistencia a pesar de los esfuerzos de disuasión. El grupo fue confrontado por las fuerzas de seguridad en dos ocasiones, lo que resalta la determinación que presentaron.
En una imagen que dejó perplejos a muchos, propietarios de diferentes comercios se mantuvieron firmes en las entradas de sus locales, armados y alerta. Este inusual pero valiente acto demostró el nivel de preocupación y el deseo de proteger los medios de subsistencia que los comerciantes han establecido con tanto esfuerzo en la comunidad.
Los comerciantes de la zona, conscientes de la delicadeza de la situación, optaron por cerrar sus puertas para evitar la propagación del conflicto. A medida que los disturbios potenciales se desvanecían bajo la influencia de la presencia policial y la determinación de los propietarios, se evidenciaba la escasez de personal que enfrentan las autoridades para abordar de manera efectiva estos incidentes en varios lugares alrededor de la ciudad.
La apacible Pergamino vivió una noche de tensión y desafío cuando la oscuridad desenterró intentos de saqueo en supermercados locales. Sin embargo, la respuesta coordinada y enérgica de la policía, respaldada por la valentía de los propietarios de comercios, logró frenar estos intentos, llevando a un cierre temporal de los establecimientos para salvaguardar la calma y la seguridad en la ciudad.(Pergamino Virtual)