El sábado , en la ruta nacional N° 8 kilómetro 226, se llevó cabo el festejo en nuestra ciudad de los 80 años del Turismo Carretera, la categoría más popular del automovilismo argentino, y las autoridades de la Actc declararán a la Casa Auto como Monumento Histórico Nacional del TC.
Días atrás, en el Museo del Deporte de Pergamino, ubicado en la Terminal de Omnibus se concretó con la presencia de autoridades de la Actc (Asociación Corredores Turismo Carretera) el lanzamiento oficial del acto que se desarrollará este mediodía y en el mismo asistieron el subsecretario de Deportes del Municipio, Agustín Buscaglia; el secretario general de la Actc, Rubén Gil Bicella; el revisor de cuentas de la misma entidad y expiloto, Jorge “Vasco” Oyhanart; Alberto “El Mono” Gagliardi (recordado por las transmisiones radiales de las carreras de TC); y los expilotos locales Héctor Arcadio Ninona, Ricardo “Caito” Iglesias y Raúl Sinelli.
En esa convocatoria, Gil Bicella coincidió en que la declaración de la Casa Auto como Monumento Histórico Nacional del TC “es un merecido homenaje” y explicó que “en la visita anterior a Pergamino acordamos este acto con el intendente Martínez y con Buscaglia, que tuvo la deferencia y la voluntad de ir para adelante y fundamentalmente a la familia de Héctor Arcadio Ninona, es un homenaje a la iniciativa que en 1981 tuvo el papá de Héctor (Ninona)”.
Sobre la Casa Auto
La Casa Auto de TC es el sueño cumplido por Arcadio Ninona, quien proyectó la obra que evoca al Ford 38 con el que su hijo Héctor finalizó quinto en el Gran Premio de 1958. Con ese auto corrió en la categoría durante varias temporadas, desde su debut en Río Cuarto el 4 de mayo de 1958 hasta su última participación en su ciudad, Pergamino, en 1963. Fueron 63 presencias y subió al podio en Villa Carlos Paz en 1959, detrás de Juan Gálvez. La construcción fue dirigida por el arquitecto Marcelo Peresón, y demandó cuatro meses con turnos de 18 a 19 horas por jornada, terminando la labor el 17 de diciembre de 1981.
En Colón
La Sra. Hermelinda Ninona fue directora de la Escuela 501 de Colón, y llevó a cabo una importante tarea de reorganización y modernización de la misma.