En la madrugada del domingo, la policía junto al contador del banco HSBC acudieron a la sede de la entidad ubicada en avenida de Mayo, entre Luzuriaga y Alberti, debido a que se había activado la alarma anti incendio.
Al ingresar a la entidad bancaria descubrieron que las rejas de las oficinas habían sido vulneradas desde afuera y que sujetos desconocidos habían intentado abrir la bóveda donde se guarda el dinero.
Según los investigadores, los ladrones entraron a la sucursal del HSBC desde el pulmón de la manzana hasta el patio que da a las oficinas. Tras vulnerar las rejas, los sujetos se dirigieron hacia las oficinas y, mediante el uso de una amoladora y de una herramienta de corte a fuego, intentaron abrir la bóveda.
Aparentemente, el uso del instrumento de corte a fuego utilizado por los delincuentes fue el que originó un principio de incendio en las hojas y carpetas que se encontraban en la oficina e hizo activar la alarma. Esta situación hizo que los ladrones abortaran el robo y que acudieran al lugar la policía y el contador de la entidad.
María Eugenia Tocalini, instructora judicial de la Fiscalía 1, recolectó la información brindada por la Policía y ordenó el análisis de las cámaras de seguridad. La jueza calificó el hecho como ‘intento de robo’.
Crédito: Diario Democracia