Pergamino: Doble homicidio ¿Rojas tiene un tercer asesinato?

Esta semana la causa judicial por el doble homicidio de Pablo Caputa y su madre María Elisa Rafaelle avanzó para sostener el estado de sospecha sobre la presunta autoría de Nicandro Rojas en la ejecución del plan criminal.

La Fiscalía 5 va a requerir a la Justicia de San Nicolás el expediente con la instrucción y la sentencia judicial en la que hallaron responsable al sospechoso de este doble homicida del delito de homicidio en ocasión de robo por un episodio ocurrido en San Pedro en 2001. Puede ser un agravante para el pedido de prisiòn preventiva

La aparición de una testigo clave fue determinante como elemento de prueba que le permite a la Fiscalìa 5 sostener que el sospechoso estuvo esa mañana en la casa del barrio Ameghino donde aparecieron sin vida Caputa y la madre.

En los primeros dìas de la semana la mujer aportó dos elementos de prueba que ubicaron a los investigadores en el interior de la vivienda de Conscripto Silva y Maipù.

Un par de zapatillas blancas y la funda de un chip de telefonía celular son los elementos de prueba que ha aportado esta testigo y serán determinantes en la instrucción judicial.

Según el relato de esa mujer ese mediodía del sangriento miércoles 27 de marzo el chef Nicandro Rojas estuvo de visita en su casa.

A la mujer le llamó la atención que en lugar de estar con dos teléfonos celulares; como lo hacía habitualmente: estaba con tres.

Durante una charla Rojas le pidió que le mantuviera guardado en la casa el par de zapatillas blancas, que en uno de los calzados guardaba la funda de una tarjeta Sim de la prestadora de telefonía celular Claro con un número anotado en el reverso.

Ese número coincide con el del teléfono desde donde le enviaron los mensajes a Soledad Ortíz y forman parte de la causa penal.

En tanto, esas zapatillas se las habría regalado Soledad Ortíz recientemente a Pablo Caputa y fueron econocidas por ella en sede judicial.

Mientras conversaban la mujer vio el contenido del mensaje que le envió a su ex esposa, Soledad Ortíz, simulando ser una ex pareja de Caputa.

“Soy la novia de Martìn (por Pablo Caputa) y más vale que te alejes de él”; decía entre otras cosas.

La testigo vio lo que escribió porque lo hizo frente a ella y los mensajes quedaron en el registro del teléfono de Soledad Ortíz; que se encuentra secuestrado desde minutos después de la captura del principal sospechoso.

En la instrucción judicial sostienen que ese tercer teléfono celular podría ser el de Caputa y el sospechoso le colocó un chip nuevo para realizar esa simulación.

El aporte de esta testigo también abona la hipótesis del crimen de Caputa para producirle un malestar a su ex esposa y ejercer un dominio sobre ella.

En este sentido, el juez de Garantías Fernando Ayestarán, ordenó la detención de Rojas por la calificación de doble homicidio con el agravante de femicidio vinculado.

Además en el procedimiento realizado en la morada de Sarratea al 1.600 incautaron un equipamiento perteneciente al Hospital “San José”. Durante el procedimiento secuestraron un oximetro pediátrico de la sala de niños del centro de salud de nuestra ciudad que tiene un valor de 40 mil pesos aproximadamente. Además había herramientas que habían sido sustraídas en el local gastronómico del barrio Centenario donde trabajaba Rojas.

Soledad Ruiz, la novia del asesinado y ex esposa del presunto asesino, declaró ante el fiscal Villalba y dio la versión de la tensa relación que se había generado cuando Rojas conoció la relación sentimental con Caputa. Contó los pormenores previos y posteriores al doble homicidio donde recibió mensajes de Whatsapp desde el teléfono de su novio; pero sería el homicida quien los redactaría. Y las circunstancias posteriores donde Rojas habría realizado publicaciones en redes sociales simulando ser Caputa.

El hermano de Soledad Ruiz brindó detalles de las últimas peleas que mantuvo con su ex cuñado por los problemas que generaba en la familia por culpa de los celos y su afán por volver a estar con ella.

Varios vecinos declararon haber escuchado gritos esa madrugada aproximadamente entre las 5:40 y las 5:45. Es el horario coincidente con el resultado de la operaciòn de autopsia con respecto al momento de la muerte del hombre de 37 años y la mujer de 64 ese mièrcoles 27 de marzo.

La hermana de Caputa tambièn brindò su testimonio en el quinto piso de la Fiscalìa y dijo estar al tanto de la nueva relaciòn sentimental de su hermano; aunque no la aprobarìa. Aparentemente segùn surge de su relato se habrìan conocido cuando ella tenìa un geriátrico en una casa vecina a las de los Caputa.

Esta semana el fiscal Villalba junto a los instructores Rita Huerta y Guillermo Pascual requerirán la comparencia de más testigos y requerirán más medidas de prueba mientras esperan los resultados de las distintas pericias.

.(Semanario El Tiempo-Pergamino Verdad)