La estabilidad política del gobierno municipal de Javier Martínez –Juntos por el Cambio- se deteriora cada vez que decide enfrentar las decisiones de la Justicia Federal, en el marco de la investigación por el agua contaminada de Pergamino.
Desde que el Juzgado Federal de San Nicolás a cargo del juez Carlos Villafuerte Ruzo comenzó a meterse de lleno en el drama que preocupaba a gran parte de su población, el gobierno municipal buscó primero ser querellante de la causa y después intentó apartar al juzgado pidiendo su incompetencia, algo que finalmente no sucedió.
En el medio, el intendente Martínez negó que el agua no sea saludable, ordenó una investigación paralela a la de la justicia y hasta llegó a admitir que él mismo tomaba agua de la canilla. Todo esto, mientras decenas de vecinos evidenciaban diferentes enfermedades y problemas de salud por estar expuestos a las fumigaciones. Al mismo tiempo, la justicia confirmó que el agua tenía 18 tipos distintos de agroquímicos y que, además, generan «daños genéticos» irreparables.
«El tema del agua es algo complejo, está manoseado políticamente y siempre surge en épocas electorales. (…) Se encontró una partícula de glifosato en miles y miles de litros porque nuestro suelo se aplica esa sustancia hace mucho tiempo, pero lo que tiene no es dañino”, había dicho hace poco el intendente.
Por todo esto, en el último dictamen el juez Villafuerte Ruzo citó a indagatoria a dos de los funcionarios de Martínez encargados de controlar el uso de las fumigaciones en el partido de Pergamino y de esta forma se avanzó, por primera vez, en indagar la responsabilidad política.
Pero el juez también mostró sorpresa por la actitud del intendente frente a la causa, quien había manifestado que se trataba de un fallo «oportunista» y «político»
En la sentencia, el magistrado dijo que las declaraciones del intendente «no favorecen al diálogo franco y respetuoso que debe existir entre las partes y el juez interviniente» y advirtió que la actitud de Martínez no hace otra cosa que «conspirar contra la investigación».
En el documento, el Juzgado explica que la libre interpretación que realizó el Tribunal se sustentó en el «principio de equidad, debido proceso y garantías constitucionales», casi contestándole a las inquietudes de Martínez, que había considerado que el fallo histórico en Pergamino en el cual se puso el límite de 3 mil metros para las fumigaciones aéreas y mil para las terrestres, no tenían tanto que ver con la salud de los pergaminenses, sino por diferencias políticas.
«Por lo cual, no existe necesidad alguna de generar expresiones como el término ´caprichosamente´, ´coloca al pueblo de pergamino a la deriva´, y ´decisiones de corte oportunista o político´», añadió al respecto el juez, en el dictamen al cual accedió Primera Plana.
«Contrariamente a lo sostenido en la presentación, esas declaraciones inadecuadas conspiran contra la investigación porque denotan acciones desmedidas y admonitorias que nunca existieron», expresó de forma contundente el juez.
Por ahora, el enfrentamiento del intendente con la justicia lo deja expuesto, pero no lo desgasta electoralmente, luego de haber conseguido 47 puntos en las PASO de agosto.(INFOCIELO)