En línea con las publicaciones de otros medios internacionales, como el Financial Times y Forbes, el experto en economía y política latinoamericana Mark Weisbrot, escribió un artículo de opinión en el The New York Times donde realizó una comparativa de indicadores económicos entre los gobiernos de Mauricio Macri y los del matrimonio Kirchner para conocer quién tiene la culpa de la crisis argentina.
En primer lugar, el diario neoyorkino, destaca que “desde la perspectiva de un economista o un científico social, no está claro el motivo por el cual deberíamos temerle al kirchnerismo”, haciendo referencia al intento del oficialismo por insertar en agenda el “miedo”, y sigue: “Si se observan los indicadores económicos y sociales más importantes, los gobiernos de los Kirchner estuvieron entre los más exitosos del hemisferio occidental.”
Así entonces, Weisbrot, codirector del Centro de Investigación Económica y Política en Washington y presidente de Just Foreign Policy, detalla que, los gobiernos K mostraron unas “disminución del 71 por ciento en la pobreza y del 81 por ciento en la pobreza extrema. Los gobiernos kirchneristas establecieron uno de los programas de transferencias monetarias condicionadas para los pobres más grandes de Latinoamérica. De acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), el producto interno bruto per cápita aumentó un 42 por ciento, casi tres veces más que la tasa mexicana”. Además recalca que “el desempleó se redujo más de la mitad y la desigualdad económica también disminuyó de manera considerable. Los doce años en los que los Kirchner estuvieron en el poder se generaron importantes mejoras en la calidad de vida de una gran mayoría de los argentinos, de acuerdo con cualquier comparación razonable”.
En contraste, dice, durante el mandato de Macri “la pobreza ha incrementado de manera significativa, el ingreso por persona ha caído y el desempleo ha aumentado. Las tasas de interés a corto plazo se han disparado del 32 al 75 por ciento actualmente; la inflación se ha elevado del 18 al 56 por ciento. La deuda pública ha crecido del 53 por ciento a más del 86 por ciento del PIB”.
Un pasaje le dedica al acuerdo entre el actual presidente con el Fondo Monetario Internacional (FMI), al que define como “el rescate financiero más grande del FMI en la historia”. Weisbrot dice directamente que el contrato “falló” y lo sustenta con un detalle preciso sobre las medidas que tomó el gobierno para acatar el acuerdo. “El incremento de la deuda es particularmente digno de atención porque Macri heredó un nivel bajo de deuda pública”, concluye.
Por último, opina que “los candidatos Fernández tendrán que esbozar cómo piensan salir de estedesastre. Pueden explicar cómo Argentina se recuperó de una crisis económica mucho más severa, con una tasa de desempleo de más del doble que ahora y en la que millones de personas anteriormente de clase media habían caído en la pobreza. Les pueden asegurar a los prestamistas que no hay por qué incumplir con la deuda pública hoy en día, como se hizo en el pasado, puesto que entonces era completamente imposible pagar. No obstante, al igual que en 2003, la economía no puede recuperarse bajo las condiciones acordadas con el FMI, así que tendrán que renegociarse”.(INFOCIELO)