En la mañana del pasado mmartes, concluyó la visita ad límina apostolorum para la primera tanda de obispos que viajó a Roma, de las regiones pastorales NEA, Litoral y Platense, con una misa en la basílica papal de Santa María Mayor, que fue presidida por el arzobispo de Corrientes, monseñor Andrés Stanovnik OFMCap. De la misma participó Monseñor Hugo Santiago, Obispo de la Diócesis San Nicolás y por consiguiente de Colón.
Sobre el encuentro, Santiago expresó que “en la Secretaría de Estado tratamos temas de suma complejidad, tales como la situación en Venezuela y acontecimientos en Medio Oriente y China. Respecto a la situación en Venezuela, la Iglesia siempre realiza un rol facilitador del diálogo, motivo por el cual no toma parte alguna por las posturas abordadas en el conflicto, aun sabiendo la complejidad de su papel. A mi criterio, la posición adoptada en pos de facilitar el diálogo, me resulta muy inteligente y conciliadora, ya que la intención es acercar posiciones”.
Del mismo modo, respecto a la situación en China, indicó: “Hemos conversado acerca del nombramiento de los obispos, y celebramos el acuerdo alcanzado. Para unificar a la Iglesia de China, abordamos aspectos que hacen al tratamiento de problemas con, a priori, difícil solución. Pero esto es un avance considerado por la Secretaría de Estado, ya que, mediante este acuerdo, resulta posible unificar los nombramientos realizados por el Estado e igualmente los confirmados por el Santo Padre”.
Sobre Medio Oriente, subrayó: “La situación allí es compleja, en especial en Siria, con todo el sufrimiento que significa y magnifica la migración, sumado al interés de las potencias mundiales. En este contexto, dialogamos sobre la realidad en Palestina e Israel, territorios que hoy se encuentran en sensibles relaciones diplomáticas, aún más delicadas por la complejidad de la situación”.
Luego de una semana colmada de reuniones en distintos dicasterios y congregaciones, en la Secretaria de Estado de la Santa Sede, con el cardenal Pietro Parolin, y con el papa Francisco, los obispos emprendieron regreso a la rutina habitual en sus diócesis.(El Norte)