La alta faena de hembras podría reflejarse en una caída de hasta tres millones de cabezas. También preocupa en este sector la posible eliminación del peso mínimo de faena en terneras
Con un 2018 que en materia de ganadería cierra con un fuerte impulso en las exportaciones, existen algunas luces de alerta para el próximo año. Según analistas del sector bovino, el rodeo nacional podría disminuir en 2019 debido a que muchos productores están liquidando las hembras por los efectos de las elevadas tasas financieras y la alta inflación.
Como agravante, desde hace tres meses la faena de hembras supera el nivel que garantiza el sostenimiento del rodeo, ya que los ganaderos venden sus vientres para financiarse.
“La faena de hembras está en 46, 47%. De continuar estos porcentajes, sin ninguna duda se va a empezar a manifestar una caída en el stock ganadero”, señaló en declaraciones periodísticas Miguel Schiaritti, presidente de la Cámara de la Industria y Comercio de Carnes argentina (CICCRA).
El sector considera necesaria que la tasa sea más baja, de entre 43 y 45% para sostener el nivel de existencias. Sin embargo, Schiaritti advirtió que, de subir uno o dos puntos más la tasa de faena de hembras, en un período de entre ocho y 10 meses se podría liquidar hasta 3 millones de cabezas.
Por su parte, el analista Víctor Tonelli, explicó que las tasas de interés del 60% que el Banco Central aplicó en agosto para contener la inflación -cercana al 50 % en el 2018- virtualmente cerró el acceso al crédito a los ganaderos.
“El productor prácticamente se corta una mano antes de firmar un cheque o ir a un banco”, explicó Tonelli. En este contexto, el especialista estima el rodeo argentino podría caer en 500.000 cabezas, a 43,5 millones de animales, el año que viene.
Otro de los factores que preocupan a esta cadena son los valores de las principales categorías más livianas, destinadas en gran parte al mercado interno. “El precio de los animales de consumo mantiene valores nominales parecidos a los del año pasado”, sostuvo Schiariti.
Como si esto fuera poco, en las últimas horas distintos integrantes de la cadena bovina se cruzaron por un tema delicado: de acuerdo a rumores que cobran cada vez más fuerza, el Gobierno nacional planea eliminar el peso mínimo de faena para hembras, que en la actualidad se encuentra en 300 kilos. Los trascendidos indican que este punto será tratado en la próxima reunión de la Mesa de Carnes, el próximo 21 de enero.
Por el lado de la Cámara Argentina de Feedlot (CAF), no dudaron en calificar a esta medida como “catastrófica”. El presidente de la CAF, Juan Eiras, no dudó en afirmar que esta decisión “es la peor que puede tomar el Gobierno nacional”, en relación a la implementación de políticas ganaderas.
En la otra vereda, la Fe Federación de Industrias Frigoríficas Regionales Argentinas (FIFRA), reiteró la postura a favor de la entidad en relación a la implementación de esta medida. “Una de las críticas que hemos hecho en la Mesa es que no se ha tomado una decisión final sobre este tema. Cuando se implementó la medida no cumplió con los efectos deseados y creo que en este tema hay una gran hipocresía de muchos”, expresó el vicepresidente de FIFRA, Daniel Urcía.
El directivo sostuvo que mientras se implementó la medida, durante algunos meses de 2018 y con el objetivo de mitigar los efectos de la sequía, “la baja de peso fue una repuesta efectiva para el productor”.(Infocielo)