Los Juegos Bonaerenses cerraron una inédita edición virtual

(Por Gastón M. Luppi, de la redacción de DIB) La edición número 29 de los Juegos Bonaerenses llegó a su fin con un “balance maravillosamente positivo”, según le calificó a la Agencia DIB Agustín Corradini, director Provincial de Torneos y Eventos Deportivos de la Subsecretaría de Deportes de la provincia. Fue una versión virtual que debió planificarse de cero en un contexto adverso marcado por la pandemia, pero con la necesidad también de incentivar a jóvenes y a adultos mayores a participar de competencias deportivas y/o artísticas en medio de aislamiento, distanciamiento y no presencialidad.

Exjugador de hockey, DT de “Las Leoncitas” (selección juvenil) campeonas mundiales en 2016 y de “Las Leonas”, Corradini llegó a la Subsecretaría de Deportes a mediados de este año con la premisa de llevar adelante los tradicionales juegos provinciales. “El primer momento fue de incertidumbre total. Fue hacer informes de factibilidad, ver qué podíamos hacer y qué no, en qué plazos, cuáles eran los tiempos operativos para poder llevar adelante semejante evento. Lo que necesitábamos para la etapa municipal, para la etapa regional y para la gran final. Y en un contexto en que la mayoría de los municipios estaban en fases en que no les permitían circular”

Los Juegos Bonaerenses son una marca registrada en la provincia. De hecho, el año que viene celebran su 30ª edición. Pero, está claro, la de este año fue una versión distinta. Hubo una primera etapa municipal, una segunda regional, que en esta oportunidad fue absorbida por la Provincia, y las finales. “Fue desarrollar un modelo nuevo, de cero, en tiempo récord”.

En los Juegos 2020 hubo más de 20 mil participantes, de los cuales 3 mil alcanzaron la etapa regional. El primer desafío “era igualar las condiciones de participación de los 135 municipios. No podíamos hacer un evento en el que las condiciones de participación modificaran el resultado; tenía que ser la misma regla para todos. E igualar las condiciones de participación, en un contexto incierto, también es dificilísimo; tuvimos que modificar los reglamentos de todas competencias. Un juego que lleva meses, años de producción, lo tuvimos que realizar en un mes”.

Por eso, dice Corradini, están “orgullosos de cómo salió”. “El balance es maravillosamente positivo. Triplicó nuestras expectativas de inscripción y la repercusión que imaginábamos tener con todas las actividades. Las obras que compitieron tuvieron el sentido que quisimos darles, que eso es lo más importante, en el sentido educativo que tienen los Juegos. El objetivo era mundos posibles y expresar las emociones en un contexto de pandemia. Cuando nos juntábamos, mirábamos, observábamos las producciones, y muchas nos hicieron piantar un lagrimón”.

La expectativa para 2021 es que los Juegos de la 30ª edición recuperen su normalidad. Sin embargo, esta edición virtual deja aspectos a tener en cuenta. “Para mí lo más profundo que deja es que encontramos en la manera virtual una forma de incorporar disciplinas que en la presencialidad, con el costo que eso conlleva, no podríamos tener. Eso me entusiasma, porque muchas veces uno toma decisiones según si el deporte es popular o no. Y para mí, si una persona lo practica y le cambia la vida, ya vale la pena. La virtualidad nos va a permitir darles espacio a actividades culturales y a deportes para que puedan ir ganando lugar, tener visibilidad dentro de la estructura de la provincia”.

Por otro lado, a partir de las producciones de las competencias artísticas “va a quedar documentado con las obras” este año tan especial que atraviesa el mundo. Va en sintonía con el objetivo planteado públicamente por Javier Lovera, subsecretario de Deportes: que los Juegos “sean un documento de la realidad emocional de los jóvenes y adultos mayores en este momento histórico”. Y además, esta edición va a dejar un informe del Comité Asesor en Ciencias del Deporte “que, me parece, marca un antes y un después en la toma de decisiones respecto de las políticas públicas a desarrollar en referencia a lo que son los deportes electrónicos”.

Discusión desde la ciencia

Esta edición de los Juegos Bonaerenses incluyó a los denominados deportes electrónicos; hubo más de 400 competencias. Es un fenómeno mundial que tiene sus detractores. ¿Son deportes? “La verdad, me corro de esa disputa”, le dice a título personal Agustín Corradini a DIB. “Me parece que es la misma disputa que se dio en años anteriores con el ajedrez y con todos los deportes de la mente. Lo viví toda mi vida en el club: había ajedrez y el bullying a los pibes era ‘vos no hacés deporte’. Y para mí es un ‘redeporte’. Me parece que el abuso de quedarse sentado en una silla y jugar, es tan perjudicial como el abuso de una actividad deportiva motora, que también hace daño”.

Por eso, Corradini no entra en la discusión. “Lo analizo desde otro lugar totalmente diferente, creo que si hay interés, vale, y lo que tenemos que hacer como educadores es contener y abrazar esos torneos deportivos, o los torneos culturales. Darles contexto, contenido y modificar los hábitos no saludables que pueden existir en todas las actividades”.

Corradini viene del deporte de alto rendimiento, y desde allí su experiencia. “Todos sabemos que un torneo, una competencia, si no está reglada, no es transformadora; todo lo contrario, es deformadora. Lo observamos con padres al lado de las tribunas insultando, chicos jugando a todo o nada. Lo mismo ocurre con todas las disciplinas, tienen beneficios y tienen cosas perjudiciales. Lo primero que hicimos en término de los deportes electrónicos fue investigarlos en profundidad, ver los informes científicos que había en el mundo. Y nos encontramos con muchos informes tremendos desde lo positivo en cuanto al desarrollo cognitivo y de los reflejos de las personas”.

Desde la Subsecretaría de Deportes, explica Corradini, decidieron hacer “un relevamiento serio, hasta ahora inexistente en Argentina. Nos planteamos: si realmente vamos a dar la discusión, vamos a darla desde el plano científico, y no desde los prejuicios y una charla de café. Lo primero que hicimos con el Comité Asesor en Ciencias del Deporte fue un relevamiento de todos los participantes de los Juegos; no podían competir si no llenaban un formulario. Ese formulario era anónimo y nos daba información acerca de los hábitos saludables o no que tenían los participantes. Ese informe lo está procesando aún el Comité Asesor en Ciencias del Deporte y es el informe relacionado con el deporte electrónico más grande, por lo menos que yo conozca, de Argentina, y me voy a poner a investigar si existe algo así en el mundo”.

Inclusión

“Me quedé absolutamente sorprendido y gratificado con la cantidad de personas con discapacidad a las que llegamos y pudieron participar”, destaca Agustín Corradini en diálogo con DIB. “Tengo muy presente una chica que participó en narración oral, una chica que se podía expresar a partir de una computadora, no tenía la capacidad del habla. Son cosas maravillosas. A todos en la Subsecretaría la verdad que nos sensibilizó mucho, y nos empujó a meterle cabeza y a empujar mucho a la inclusión de la discapacidad, que tan relegados están históricamente”. (DIB)