Las importantes lluvias del último fin de semana que superaron los 100 milímetros en algunas localidades, como Rufino, derivaron en desbordes de la laguna La Picasa. Así a la altura de los kilómetros 413 y 415 se acumuló agua en la calzada y carpeta asfáltica. La situación se había advertido días previos por parte del Comité de la Cuenca La Picasa y también del Consejo de Entidades Empresarias y Productivas de Santa Fe.
Esta última agrupación, en un enérgico comunicado, reclamó “rápidas medidas” para prevenir los colapsos ante las precipitaciones, ya que alertó sobre la existencia de canales clandestinos.
En este sentido, el documento interpeló a los gobiernos nacional, de Santa Fe, Córdoba y Buenos Aires a “interrumpir los aportes de agua provenientes de obras hídricas e hidroviales irregulares que están provocando esta situación”.
Asimismo, se solicitó “avanzar con las obras de drenaje proyectadas en la provincia de Santa Fe, a subsanar cuestiones legales que en provincia de Buenos Aires impedirán su utilización y que ponen en un potencial riesgo de inundación a miles de hectáreas productivas y poblaciones”.
En tanto, en la jornada del pasado domingo, la provincia de Santa Fe envió máquinas para aliviar el sector afectado y retirar el agua de la ruta. No obstante, se trató de una medida paliativa para evitar el corte del trazado.(Crédito El Puntal)