(ON 24) Black Bamboo, frigorífico ubicado en Hughes, al sur de la provincia de Santa Fe, desde este lunes paró su faena y, entre 7 y 15 días la planta estará sin producción. En la empresa trabajan 600 empleados.
La Planta Hughes comenzó sus actividades directamente ligadas a la exportación en de carne en 1997, lográndose en poco tiempo posicionar como una de las empresas líderes del sector. Posteriormente, en 2004, fue adquirida por una empresa de origen inglés y, tres años más tarde, pasó a manos del grupo brasileño Marfrig Group. En 2016 un grupo inversor de origen chino se hizo cargo de la planta.
En este contexto, Luis Medina, consultor de la industria frigorífica, analizó: “El panorama del sector es bastante complicado. Lo cierto es que la mayoría de las empresas frigoríficas venían con una buena performance de los años pasados. Los últimos dos años de la administración de Mauricio Macri a la mayor parte de los frigoríficos exportadores les fue muy bien, al tener un dólar liberado y los precios internacionales en alza. Así, invirtieron y pusieron sus plantas a la máxima capacidad”. Considera que tras los resultados de las PASO no “habrá cambios” en las medidas del gobierno.
En tanto, agregó que “se sabía que con esta administración las cosas iban a cambiar, cepo al dólar, distintos tipos de cambio, cepo a las exportaciones. Y en la industria frigorífica, si bien se pensaba que no se iban a levantar las restricciones, sí que iba a haber una liberación de los cortes prohibidos, fundamentalmente de la vaca, con destino a manufactura y conserva, que tiene como destino fundamentalmente China. No tiene injerencia en los precios de consumo interno”.
Y consideró que “la medida que toma el gobierno es sólo política, no hay una explicación lógica de lo que se quiere hacer”.
“Estamos todos viendo qué hace el gobierno –continuó Medina-, si se radicaliza en sus medidas o empieza a tomar un camino racional. Pero sabiendo cómo es la conducción, creo que se van a radicalizar, no van a hacer ningún tipo de cambio. El Presidente el domingo dio una pista, cuando dijo que en estos dos años tenemos que seguir en el mismo camino”.
Asimismo, sostuvo que “los frigoríficos vienen con nafta, pero cada día tienen menos reserva. En estos momentos, ninguno de los grandes frigoríficos está trabajando al 100%, están entre el 80 y el 50%, y algunos han decidido parar, como Black Bamboo, que decidió hacerlo por 15 días. Es cierto que no se han producido despidos masivos en la industria, pero también que hay una merma en la capacidad de mantener productiva a las plantas. Todas las plantas de exportación están adaptadas para trabajar a máximo volumen, cuando empiezan a bajar los volúmenes, los costos se los llevan puestos”.
“Lo de Black Bamboo es una luz amarilla para todos”, aseguró. Y seguido, amplió: “Hay empresas que son más fuertes, otras que han concentrado su capacidad productiva para bajar costos. Por ejemplo, Friar tiene dos plantas y Nelson siempre es un fusible, Swift, tiene la planta de Rosario y la de Venado Tuerto, y esta última siempre es un fusible”.
La planta ubicada en Hughes llegó a esa situación “fundamentalmente por la restricción a las exportaciones, que es la frutilla del postre. Pero con el desdoblamiento cambiario, retenciones, la suba de servicios y de impuestos, el negocio lo ponés en el nivel de explotación o menos”. Vale señalar que Black Bamboo llegó a faenar 15.000 animales por mes y se pasó a 500.
Respecto a la decisión de la empresa de suspender momentáneamente la producción, la medida “busca minimizar pérdidas”. No obstante, señaló que “seguramente retome la actividad, porque tiene clientes muy importantes, arranca la sueva zafra de kosher que es uno de los negocios primordiales de la planta, inclusive hacen cortes especiales”.