La explosión de la pandemia en India en los últimos meses hizo que se conociera una rara infección asociada al coronavirus, llamada hongo negro. Al tener cientos de miles de casos diarios de Covid-19, esta afección multiplicó sus manifestaciones y su propagación en ese país y, como el SARS-CoV-2, está llegando a otras regiones.
“La mucormicosis, comúnmente conocida como hongo negro, se ha observado recientemente en varios pacientes con Covid-19. La información y el diagnóstico oportuno pueden reducir la propagación de esta infección micótica”, escribió el ministro de Salud indio, Harsh Vardhan en redes sociales, para generar conciencia acerca de la enfermedad.
En tanto, la alarma sobre esta patología asociada al coronavirus se encendió en distintos países ya que comenzaron a reportarse casos. El hongo negro ya fue detectado en América Latina en Chile, Uruguay, Brasil y México.
Las infecciones de hongo negro se han presentado en pacientes que se están recuperando o ya se han recuperado de la infección por coronavirus.
“Las personas se contagian de mucormicosis al tener contacto con esporas fúngicas en el ambiente. También se puede desarrollar en la piel después de que el hongo entra a través de alguna herida, rasguño, quemadura o cualquier tipo de daño en la piel”, indicó la cartera sanitaria india, según un reporte de la agencia Xinhua.
Expertos en salud señalaron que el hongo negro causa úlceras en las fosas nasales y si no se lo diagnostica a tiempo puede desarrollarse detrás de los ojos y hasta en el sistema nervioso central.
Jorge Geffner, investigador superior del Conicet, señaló que se trata “de un hongo oportunista porque causa una infección cuando el sistema inmune está bajo”.
El especialista indicó que “no es un hongo que está directamente asociado al Covid-19, la frecuencia no baja de uno cada 500 o mil, pero en la India al haber tantos casos y existir la necesidad de suministrar oxígeno y corticoides para que el paciente pueda respirar, entonces surgen este tipo de cuadros en los casos severos.
Geffner destacó que el suministro de corticoides “es uno de los pocos tratamientos que tenemos para combatir el Covid-19, pero si el paciente está inmunosuprimido ese hongo si ingresa puede crecer”. (DIB)