El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) anunció a través de su cuenta de Twitter que el fenómeno de La Niña llegó a su fin, de acuerdo a una publicación de la Nathional Oceanic and Atmopheric Administration (NOAA, por su sigla en inglés) del Departamento de Comercio de EE.UU.
No obstante, el SMN aseguró que “en Argentina todavía no vamos a ver mucha variación en las precipitaciones. A pesar del cambio en la temperatura del océano, la atmósfera todavía se mantiene con una circulación acorde a la de La Niña”.
“Después de un año y medio de La Niña continua, el sistema océano-atmósfera del Pacífico tropical ha hecho la transición a neutral, lo que permite a la NOAA emitir su ‘aviso final de La Niña’”, indicó el organismo internacional.
Según el SMN, el Niño/Oscilación del Sur (ENOS) es un fenómeno natural caracterizado por la fluctuación de las temperaturas del océano en la parte central y oriental del Pacífico ecuatorial, asociada a cambios en la atmósfera. Este fenómeno tiene una gran influencia en las condiciones climáticas de diversas partes del mundo.
El ENOS es uno de los patrones más importantes de la llamada variabilidad climática interanual, que incluye modificaciones de la circulación de la atmósfera que pueden durar desde varios meses a pocos años. El Niño y La Niña son los componentes oceánicos, mientras que la Oscilación del Sur es el componente atmosférico, y ambos dan origen al término El Niño/Oscilación del Sur. Este fenómeno comprende tres fases: El Niño, La Niña y una fase neutra.
Los efectos de esta oscilación sobre nuestro país son diversos y varían dependiendo de la fase, la región y la época del año. En particular, durante la primavera y verano el noreste argentino tiende a registrar precipitaciones superiores a las normales durante una fase de El Niño. Durante la fase La Niña la misma zona tiende a registrar precipitaciones por debajo de lo normal.
El fenómeno tiene una periodicidad irregular, usualmente ocurre cada dos a siete años, y se declara una fase El Niño/La Niña cuando las temperaturas del mar en el Pacífico oriental tropical aumentan/disminuyen 0,5°C por encima/por debajo del promedio durante varios meses consecutivos (5 trimestres).
Se cree que el nombre de este fenómeno se originó hace siglos atrás por “El Niño Jesús”, cuando en fechas cercanas a la Navidad, los pescadores peruanos se refirieron al fenómeno meteorológico en honor al recién nacido Niño Jesús. (DIB)