El Gobierno nacional oficializó este jueves la decisión de traspasar a la Administración General de Puertos (AGP) el control de la Hidrovía Paraná-Paraguay, la vía navegable de 3500 kilómetros por la que pasa el 80% del comercio exterior argentino y que estaba en manos de la empresa belga Jan de Nul junto a su socio local Emepa.
Mediante el Decreto 427/2021, publicado en el Boletín Oficial, con las firmas del presidente Alberto Fernández; el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, y el ministro de Transporte, Alexis Guerrera; se resolvió otorgar a la AGP “la concesión de la operación para el mantenimiento del sistema de señalización y tareas de dragado y redragado y el correspondiente control hidrológico de la Vía Navegable Troncal”.
Se precisa que la medida se aplica desde el kilómetro 1238 del Río Paraná, punto denominado Confluencia, hasta la Zona de Aguas Profundas Naturales en el Río de la Plata exterior”. Asimismo, se establece que el Ministerio de Transporte estará a cargo de “la confección, suscripción y aprobación del contrato de concesión” a celebrar con la empresa del Estado, en el cual se fijarán las condiciones de prestación del servicio, que tendrá un plazo de doce meses, a partir del 30 de julio cuando vencerá la última prórroga de la concesión actual.
En la normativa se indica que en el contrato de concesión se establecerá “la base tarifaria y el mecanismo de financiamiento por el sistema tarifa o peaje” que percibirá la AGP, “sin perjuicio de las subvenciones, subsidios y/o transferencias de aportes del Estado Nacional que transitoriamente resulte necesario efectuar, a los fines establecidos en el contrato”.
También en el contrato se definirá “la delimitación de los ríos, canales, zonas, tramos, trazas y/o secciones en las que se conformará o segmentará la Vía Navegable Troncal, para que dichos tramos en cualquier momento se puedan afectar o desafectar respecto del alcance y el objeto del contrato, total o parcialmente, con relación a los distintos servicios que se prestan en los mismos”.
El Ministerio de Transporte también definirá “el plan de obras a ejecutar y los parámetros técnicos exigidos para su ejecución, como así también los niveles de calidad o estándares para la adecuada prestación de los servicios conexos involucrados”.
Además, se instruye a la Administración General de Puertos, la incorporación del personal que, a la fecha de finalización de la actual concesión, se desempeñare prestando servicios para la misma. La AGP deberá celebrar, siguiendo los principios y lineamientos de su propio régimen, “las contrataciones necesarias para garantizar la navegabilidad de la Vía Navegable Troncal, manteniendo el actual nivel de prestación del servicio”.
De esta manera, el Gobierno da un giro en el control la vía fluvial por la que salen el 80% de las exportaciones argentinas. Desde 1995, la empresa Hidrovía S.A., conformada por el gigante belga Jan de Nul en sociedad con la argentina Emepa S.A., se encuentra a cargo del dragado y balizamiento de la mencionada vía navegable. Según trascendió, al menos un consorcio chino está interesado en operar esa vía estratégica, lo cual genera preocupación en los Estados Unidos.
El ministro de Transporte, Alexis Guerrera dijo que la licitación contemplará “nuevos dragados, accesos a puertos públicos, con una mirada puesta de Santa Fe hacia el norte, para hacer más navegable toda esa zona”. (DIB)