Mario Buffarini, padre de Ezequiel y Jesús Buffarini, está sumido en el dolor y la incredulidad después de perder a sus dos hijos en circunstancias trágicas y separadas por apenas seis años. En diciembre de 2017, Ezequiel, de 24 años y recién convertido en padre, perdió la vida en un fatal accidente de moto en Río Cuarto. Solo unas semanas atrás, en 2024, Jesús, de 23 años y medio hermano de Ezequiel, fue víctima de una brutal golpiza durante una discusión en un boliche de General Cabrera, Córdoba.
La historia de dolor de la familia Buffarini comenzó en 1994, cuando perdieron a un hermano de Mario en un trágico accidente. Desde entonces, han enfrentado la devastación de perder a dos hijos en circunstancias igualmente dolorosas.
Jesús, jugador de fútbol del equipo Independiente Dolores de General Cabrera, era un joven lleno de vida y padre de una niña de cuatro años. Trágicamente, su vida fue truncada por la violencia incomprensible de una pelea en un boliche, donde fue golpeado hasta la muerte por un amigo y compañero de equipo.
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El relato del padre de las víctimas, Mario Buffarini, revela el profundo sufrimiento y la impotencia frente a la violencia sin sentido que se cobró la vida de sus hijos. Preguntas sin respuesta y un dolor inconsolable acompañan a esta familia que enfrenta una pérdida inimaginable.
Las autoridades han imputado al presunto agresor de Jesús por «homicidio preterintencional», mientras la comunidad local se conmociona por la tragedia que ha golpeado a esta familia. La muerte de Ezequiel en un accidente de tránsito previo añade una capa adicional de tragedia a este relato desgarrador.
La historia de los Buffarini es un recordatorio angustioso de la fragilidad de la vida y la brutalidad del destino, que ha dejado a una familia destrozada por la pérdida de dos seres queridos en circunstancias tan desgarradoras.(Pergamino Virtual)