El Padre Damián Vidano de la Parroquia Nuestra Señora de Fátima de San Nicolás y capellán de la Unidad Penal Nº 3 se está por embarcar en un gran desafío: participar de una travesía a nado con otros 11 deportistas argentinos y 12 deportistas ingleses
“Esto empezó hace unos meses atrás, cuando estaba en un momento personal bastante complejo acompañando la etapa final de la vida de mi mamá. Y me llamó una fundación alemana que se llama Pax que lo que hace es trabajar a nivel mundial por generar espacios de encuentro de diálogo, encuentros para generar la paz entre los pueblos. Los conocí el año pasado en una experiencia a nado que desarrollamos en Italia, en la costa del Mediterráneo para trabajar la temática de los refugiados. Ahí me contacté con ellos. Teníamos varias cosas en común por las que estábamos trabajando. Me llamaron, al principio les dije que no, y cuando tuvo todo el desenlace de mi mamá, pensé que era una buena ocasión para seguir trabajando en pos del diálogo y del encuentro”, explicó en una entrevista al diario El Norte.
Así el miembro del Secretariado de la Pastoral Carcelaria Argentina adelantó de qué se trata la propuesta que protagonizará el 4 de febrero próximo. “Nos vamos a encontrar en Córdoba el primero de febrero de 2018, generando un espacio de fraternidad. Después partiremos hacia Río Gallegos y de ahí iremos a Malvinas. Nadaremos del Puerto Stanley hasta el Puerto San Carlos, y ahí realizaremos otra travesía de unos 10 km más por el estrecho de San Carlos que es muy significativo porque allí se produjeron los enfrentamientos durante la Guerra del `82. La idea es realizar una breve introducción y leer un escrito que acordaremos, una imagen de la Virgen del Luján que va a bendecir el Papa cuando pase en su visita a Chile, acompañará todo el desafío”, detalló.
Asimismo, agregó que “no es nada fácil porque las aguas son bajo cero, suele haber fuertes vientos, las mareas son difíciles de sobrepasar y se complica en esa parte porque hay grandes bancos de algas que dificultan el nado”, y precisó que “son unas cuatro horas de nado asistidos por un equipo de profesionales. Cuando termine la travesía, cuando nos repongamos, terminaremos en el Cementerio de Darwin con una celebración religiosa”.
Además del mensaje de paz, la movida tiene un fin solidario. “Pax consiguió varias empresas que ayudan a solventar los gastos de esta experiencia. Se sacará un estimativo de cuántas brazadas podemos meter en esas horas de nado, que se van a convertir en kilos de alimentos que se va a destinar a una organización llamada San Vincenzo que trabaja en Europa en asistencia de campos de refugiados”, señaló.
El Padre Vidano marcó que el mensaje que se quiere dar en esta travesía a nado por Malvinas, “es que el deporte es un lenguaje universal que acerca a los pueblos y puede contribuir a que las personas se encuentren y que superen los conflictos”. (InfoGEI)