El arzobispado de Mendoza advirtió sobre «graves irregularidades» de dos sacerdotes, uno del clero diocesano de Santa Rosa (La Pampa) y otro del de Venado Tuerto (Santa Fe), presentes en la provincia, y que no tienen ningún tipo de autorización para ejercer su ministerio pastoral en esta jurisdicción eclesiástica.
Texto del comunicado
Ante distintas consultas efectuadas en estos días, y para prevenir todo tipo de oportunismos, malos entendidos o que algunos fieles se puedan ver sorprendidos en su buena fe, este Arzobispado comunica cuanto sigue:
– El P. Gustavo Daniel Caro, del clero de La Pampa, presente en nuestra arquidiócesis sin ningún tipo de autorización para ejercer su ministerio pastoral, no tiene licencias ministeriales en su diócesis de origen ni tampoco aquí en Mendoza, por lo que no puede presidir la Santa Misa en ninguna capilla ni en su casa, ni recibir confesiones, ni administrar los restantes sacramentos o asistir a matrimonios
– El P. Andrés Quiroga, del clero de Venado Tuerto, presente en nuestra arquidiócesis por razones de salud, no tiene licencias ministeriales para presidir la Santa Misa en ninguna capilla ni en su casa, ni recibir confesiones, ni administrar los restantes sacramentos o asistir matrimonios en esta Arquidiócesis.
Los fieles, ahora anoticiados de estas graves irregularidades, son responsables ante Dios y la comunidad eclesial de no contribuir con su presencia a favorecer actitudes y comportamientos gravemente contrarios a la comunión, además de poder encontrarse ellos mismos como receptores de algunos sacramentos inválidos, como la confesión y el matrimonio; y sin perjuicio de la ilicitud de todos los restantes.(AICA)
De Amenabar a la fama
El cura Andrés Quiroga sus acciones tomaron carácter nacional cuando Al grito de «En nombre de Cristo, fuera de al casa de Dios», el párroco en ese entonces de la localidad de Amenábar, ubicada en el departamento General López, literalmente echó de la iglesia al titular de la subcomisaría 14ª, Mariano Rodríguez, quien se llegó al lugar una vez finalizada la misa vespertina para recordarle que estaba prohibidas las reuniones en locales cerrados,. en el marco de las medidas restrictivas para reducir la circulación en el marco de la pandemia de coronavirus.