Un oficial del Servicio Penitenciario Bonaerense, franco de servicio, protagonizó una acción solidaria y heroica este jueves en Dolores cuando fue al supermercado para unas compras y se topó con una situación de emergencia: una bebé convulsionaba, por lo que la reanimó y la condujo lo más rápido que pudo al hospital.
Por fortuna la beba de dos años salió de la situación de crisis y se recupera. El oficial penitenciario que salvó la vida de Isabella se llama Franco Silva, un alcaide del escalafón general que desempeña funciones en la Unidad 6 Dolores.
Franco se dirigió este jueves a la tarde al supermercado ubicado en Lincoln al 2100 para cumplir con el pedido de su hijo Bautista, de un año y medio, y para comprar algo para acompañar a los mates que, más tarde, tomaría con su esposa Camila, también penitenciaria.
Sin embargo, los planes cambiaron y cuando llegó al comercio se topó con una mamá que, desesperadamente, pedía ayuda para su pequeña de casi dos años que estaba convulsionando. Sin dudarlo, Franco tomó a la niña y comenzó a asistirla.
“Cuando la madre me dio a la nena vi que tenía signos vitales, así que enseguida empecé a hacerle masajitos en el pecho. Después, paró de convulsionar, pero ya no sentía sus latidos. Se puso blanca, con los ojitos abiertos, y ahí arranqué con la reanimación cardiopulmonar”, contó el agente penitenciario.
Luego, subió a las dos al auto y, mientras manejaba, con una mano, continuó con los primeros auxilios. Sobre esas casi 25 cuadras, Franco expresó: “Mientras íbamos en viaje, rogaba a Dios que la nena llegara con vida al hospital”.
Finalmente, su deseo se cumplió e Isabella recibió la atención médica que necesitaba. “Esta mañana le mandé un mensaje a la mamá y me dijo que estaba mejor, pero, por lo delicado del cuadro, esperan un traslado a un centro de mayor complejidad”, relató el oficial penitenciario.
Los compañeros de trabajo lo felicitaron por su accionar, aunque la mayor emoción la sintió cuando volvió a su hogar. “Al entrar a casa, mi bebé me abrazó y rompí en llanto, porque no caía en la realidad de lo que había vivido”, admitió Franco.
El agente contó que los conocimientos en reanimación cardiopulmonar (RCP) y primeros auxilios los incorporó gracias a los cursos de capacitación que brinda el Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB) al personal, con el acompañamiento del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la provincia de Buenos Aires.
Incluso, recordó que, hace siete meses, también salvó la vida de un interno que sufrió un paro cardiorrespiratorio, gracias a las técnicas incorporadas en los años que lleva trabajando, tanto en la Alcaidía Penitenciaria Batán y en la Unidad 15 Batán, como en la Unidad de Dolores, en la que cumple funciones actualmente. (Crédito: InfoCielo)