Día del agua: ¿Por qué se celebra el 22 de marzo?

Todos los 22 de marzo se celebra el Día del Agua en todo el mundo, con el fin de rendirle homenaje y tomar conciencia respecto al recurso natural más importante de planeta. Enterate a qué se debe esta fecha.

Desde 1993, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) declaró al 22 de marzo como día del agua durante la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Medio Ambiente y Desarrollo, que se llevó a cabo en Río de Janeiro, Brasil.

A partir de entonces, cada año se conmemora esta fecha bajo un lema específico. El primero de ellos fue «Cuidar de nuestros recursos hídricos en cosa de todos». Este 2023, la temática elegida es «Acelerar el cambio para resolver la crisis del agua y el saneamiento».

Pese a que todas las actividades sociales y económicas dependen del agua, como asi también los principales conflictos del planeta, más de 2.000 millones de personas viven sin acceso al agua potable y hasta 3,5 millones de ellas mueren por enfermedades vinculadas a la mala calidad del agua.

Es por ello que, esta celebración tiene como fin concientizar acerca de la crisis mundial del agua y lograr lo prometido por el mundo en 2015 con Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) 6: el acceso al agua para todos los habitantes del globo para 2023.

Sin embargo, aún existen numerosas comunidades con dificultades para acceder a este derecho fundamental. De hecho, según la ONU, los gobiernos deben trabajar un promedio de cuatro veces más rápido para cumplir con el ODS 6 a tiempo.

En tanto, del 22 al 24 de marzo de este año, se llevará a cabo la Conferencia de la ONU sobre el Agua 2023 en Nueva York, donde los países se reunirán para buscar soluciones a la crisis actual del agua y el saneamiento.

Hábitos sustentables para cuidar el agua:
Para generar un cambio visible respecto al acceso al agua, cada uno de nosotros puede llevar a cabo acciones cotidianas y bastante simples para cuidar este recurso natural. A continuación, te dejamos algunas sugerencias:

Tomar baños de corta duración, cerrando la canilla y utilizando el agua para enjugar el cabello y el cuerpo.
Utilizar el agua en la que se lavan las frutas y verduras para regalar las plantas. Lo mismo se podría hacer cuando se lavan ropa o se limpia parte de la casa.
Regar las plantas y el pasto en horarios nocturnos con la cantidad necesaria de agua.
Aprovechar el agua de lluvia.
No dejar la canilla abierta mientras se hacen otras tareas.
Revisar las cañerías para evitar que existan goteras.
No arrojar aceite u otros productos contaminantes por las piletas de la cocina y el baño.
Utilizar, en lo posible, un modo económico o ecológico en el lavarropas.
Crédito: InfoCielo