Colón, Salto, San Antonio de Areco con cargamentos de marihuana ¿Quien protege a los narcos en estas localidades?

 

En un continuo accionar de estas bandas de narcotraficantes en nuestra región, eligiendo ciudades pequeñas y con controles “permeables” y seguramente utilizando conexiones para su protección y apoyo logístico. Recordar que  en el 2001 se había denunciado vuelos clandestinos descargando extraños bultos en un campo en ubicado en el centro de un triángulo conformado por Colón, Pearson y Pergamino y donde era apoyado por camionetas que salían de  nuestra ciudad.

Ahora una avioneta «narco» procedente de Paraguay fue derribada a tiros por personal de Gendarmería en la localidad bonaerense de San Antonio de Areco. Los efectivos incautaron la droga que transportaba y detuvieron a seis personas. El piloto, que continúa prófugo, habría logrado escapar en remise.


La aeronave cargaba 450 kilos de marihuana y fue interceptada dos veces por la Fuerza Aérea a través del Centro de Operaciones Aeroespaciales Merlo (COAE), que luego dio aviso al Ministerio de Seguridad.

El operativo, a cargo de la Gendarmería con la colaboración de la Policía de Chaco, se produjo el domingo entre las seis de la tarde y las ocho de la noche. La avioneta venía siendo monitoreada en medio de un procedimiento a partir de una investigación judicial iniciada en Formosa.
Las averiguaciones había comenzado en mayo pasado y la llevaba adelante la fiscalía federal 2 de Formosa, a cargo del fiscal Luis Benítez, quien contaba con el dato de que el cargamento iba a aterrizar en una avioneta de bandera uruguaya, matrícula CX-BDR, en esa localidad a unos 25 kilómetros de San Antonio de Areco (En la población de Dugand). En el lugar se secuestraron 16 bultos con un total de 450,867 kilogramos de marihuana y se logró detener a 6 integrantes de la banda, 5 de ellos de nacionalidad paraguaya y un argentino. La aeronave escapó.
Tras el despegue, los gendarmes dieron aviso a la policía bonaerense que, en pocos minutos, detectó el aterrizaje de emergencia de la avioneta en un campo de la localidad de San Andrés de Giles, a pocos kilómetros de distancia, aunque no pudo ser hallado el piloto.
Se cree que el piloto, aparentemente de nacionalidad brasileña, intentó realizar un reabastecimiento de combustible para regresar a Paraguay, pero al no poder lograrlo decidió escapar del lugar y dejar abandonada la aeronave.
Aeroclub de Colon
Al Aeroclub de Colón llegaban 400 kilos de marihuana en un viaje de una avioneta desde Paraguay. Se cree que hubo otros no detectados. En el operativo denominado «Halcón verde», fueron apresados un hombre oriundo de Mar del Plata y dos ciudadanos paraguayos.
Como se recordará en noviembre de 2011, una avioneta Cessna, cuya matrícula estaba adulterada aterrizó en medio de un campo de pastoreo, a la vera del kilómetro 157 de la ruta provincial 32 (la continuación de la ruta santafesina número 18, que sale desde Rosario por avenida Ovidio Lagos y conduce a Pergamino). Por entonces, dos brigadas del Grupo Halcón de la policía bonaerense habían llegado al lugar a la espera de abordar la nave apenas tocara tierra.
Las primeras pericias indicaban que la nave se quedó sin combustible y tuvo que aterrizar. Por otra parte, casi a la misma hora, en una estación de servicios de Pergamino, la policía apresó a dos ciudadanos paraguayos quienes, según la investigación, serían los responsables de recibir la marihuana para luego trasladarla al conurbano bonaerense. A ellos llegaron a través de las escuchas telefónicas en tiempo real, aseguraron los pesquisas. Los acusados, estaban en contacto con el piloto para ir a buscar la droga apenas aterrizara», confiaron, y dijeron que les fue secuestrado un Fiat Siena en el que se movilizaban. En un GPS secuestrado por la policía en un auto con miembros de la banda se encontró que el destino marcado era el Aero Club de Colón, ubicado en Ruta 8 en el kilómetro 269.
La causa judicial que terminó por desbaratar la organización delictiva tuvo su origen en una llamada anónima realizada a la Delegación Antinarcotico de Pergamino, realizada el 14 de noviembre de 2011 y que decía «que unas personas que se manejaban en un Peugeot 206, color blanco, comentaban que entre el día indicado y el siguiente iba a llegar un cargamento de drogas en un avión al Aero Club de Colón» entre otros detalles.
Una vez que tomó intervención la Justicia comenzó a realizar tareas de investigación en el Aero Club de Colón. Los dos agentes destacados y camuflados observaron a un automóvil Peugeot 206, patente DOP 213, color blanco que estaba estacionado sobre la banquina de la Ruta Nacional Nº 8, que va desde Pergamino a Colón, frente a las instalaciones del Aero Club, con tres personas que descendidas del vehículo habrían efectuado anotaciones mirando hacia la pista de dicho aeródromo .
La Justicia Federal comprobó que el destino originario de la avioneta que transportaba 378 kilos de marihuana era el Aeroclub de Colón.
Por otra parte, entre los elementos secuestrados a Gustavo Horacio Crespo (el piloto) se encontró un boleto de ómnibus de la empresa Crucero del Norte a su nombre con fecha del 11 de noviembre de 2011, con destino a Asunción del Paraguay, como así también dos facturas de la Compañía Paraguaya de Comunicaciones S.A. (Sucursal Caazapa, Paraguay) de fechas 10 y 14 de noviembre. El Juez da por probado con estos indicios que en fecha próxima a la del hecho, Crespo se encontraba en el vecino país, por lo que es dable presumir que salió desde Paraguay y que desde allí provendría el material estupefaciente que se secuestró. A ese país en fecha cercana al día del hecho habría también viajado Nemesio Fernández Benítez
Los elementos destacados por el magistrado Villafuerte Russo constituyen en su conjunto prueba suficiente para tener por acreditada la participación de todos los imputados en el hecho, destacándose que a Gustavo Horacio Crespo le habría correspondido dada su condición de piloto e instructor de vuelo, el transporte de la droga desde el Paraguay hasta Colón
Aeroclub de Salto
El Tribunal Oral Federal 2 de Buenos Aires dictó en el 2016, condenas de hasta 13 años de prisión por tráfico de estupefacientes desde la provincia de Misiones que en parte tenían por destino final al aeroclub de Salto, en Buenos Aires.
La fiscal general que intervino en el juicio, Gabriela Baigún, había advertido al término de sus alegatos que «no se puede llevar adelante una lucha contra el narcotráfico si no se puede saber de dónde y hacia dónde vuelan aquellos aviones que no van a Ezeiza y Jorge Newbery». En ese sentido, había indicado también que hay aeródromos que no cuentan con control y que «sólo llevan un registro de vuelos los pilotos».
En su veredicto, los jueces Jorge Alberto Tassara, Rodrigo Giménez Uriburu y Jorge Gorini impusieron las mismas penas que había solicitado el Ministerio Público Fiscal, quien además de Baigún estuvo representado por las fiscales ad hoc María de los Milagros Mazzei y María Laura Ferraris. Las condenas -por el delito de transporte de estupefaciente agravado por ser cometido por más de tres per-sonas y en forma organizada- alcanzaron a Lorenzo Cubilla González (13 años); Armando Cubilla González (12 años); Atilio Ernesto Acuña (11 años); Antonio Benítez (10 años), y Leonardo Villalba Zargosa, Javier Villanueva, Marcelo Cabrera y Claudio Maldonado (8 años). La única diferencia fue respecto a Adolfo Gedda, para quien la fiscalía había solicitado una pena de 9 años de prisión y el Tribunal terminó absolviendo en un fallo de dos votos contra uno. Además, las fiscales habían postulado la absolución de Gustavo Sotelo y Raúl Toribio Torres.
El Ministerio Público Fiscal consideró como agravante de las penas la cantidad de estupefaciente incautado -3.113 kilo-gramos de marihuana-, la cantidad de personas involucradas y la modalidad en que se llevaron adelante los hechos, lo cual requirió de un «esfuerzo de logística, autos de apoyo y una red de personas conectadas». En su exposición, la fiscalía tuvo por acreditado que por lo menos desde abril de 2014, los imputados Lorenzo Cubilla, su hermano -Armando Cubilla- y Atilio Acuña organizaron el diagrama delictivo necesario para lograr el transporte de marihuana desde la provincia de Misiones y con destino final, para parte de la misma, un aeroclub ubicado en la localidad de Salto, en la provincia de Buenos Aires.
La Fiscalía explicó que el transporte de marihuana se efectivizó entre en junio de ese año, pero no pudo arribar al citado aeroclub debido a la intervención de personal de la Policía Metropolitana que, por disposición del Juzgado Federal Nº 9, interceptó en la autopista Rosario-Santa Fe un camión que trasladaba en su interior tres toneladas de marihuana, acondicionada en 3570 «panes».
En el comienzo de su alegato, Baigún, Mazzei y Ferraris explicaron por medio de diapositivas que se logró el secuestro de 3113 kilogramos de marihuana, más de un kilo de cocaína, más de 23.000 dólares, cinco automotores, 60 teléfonos celulares y chips. Del mismo modo y a través de un mapa reconstruyeron el trayecto realizado por el camión que transportaba la droga y el auto que le daba apoyo.