El martes a la 1.30 de la madrugada sonó la alarma en la aceitera General Deheza ubicada en calle 44 y 127.Signo inequívoco que merodeaban intrusos.
Los ladrones ingresaron primero a la oficina. En este caso forzaron una ventana, y una vez en el interior revolvieron los escritorios y el mobilario, buscando dinero en efectivo. En el sitio no faltaron elementos.
Tras la incursión en las oficinas se dirigieron al taller de la empresa. Se supone que con un gato usado para los neumáticos de los autos, levantaron una reja de seguridad y forzaron la puerta. Los malvivientes se llevaron el 50 por ciento de las herramientas que se encontraban en el lugar de trabajo (amoladoras, taladros eléctricos, herramientas de mano).
Los rateros debieron contar con apoyo de un vehículo. Al sonar la alarma se alertó a la Policía Comunal que llegó al sitio pero ya los cacos habían desaparecido. El ilícito es investigado por la DDI de Colón y se revisan cámaras de seguridad.