Colón: La región debería prepararse para épocas de lluvias e inundaciones

(Por Victor Calvigioni) La región se debería preparar para las próximas épocas de lluvias, “limpiando” y profundizando algunos cursos de agua, revisando los canales clandestinos, y además forestando campos- entre otras cosas- . La inversión en el presente ahorraría grandes pérdidas por inundaciones de centenares de hectáreas.

El Ingeniero Lorenzo  Parodi contaba, que tuvo la satisfacción de acompañar y ser auxiliar del sabio ruso Nicolás Vavilov, en su visita a nuestro país en el año 1927.

El científico ruso tenía gran deseo de recorrer la «Pampa Húmeda» considerada «Granero del Mundo». En su paso por Colón,  visitó la Estancia «Santa Juana» de Luis Duhau.

Concluida su visita y  en la reunión de despedida, según el Ing. Parodi, Vavilov dijo que “si Dios regresara a la tierra para instalar en ella el Paraíso Terrenal, elegirá un lugar en la República Argentina entre la ciudades de Pergamino, Colón, Venado Tuerto y Rosario”.

                                          El desagüe

La situación se debe entender desde diversos aspectos. En primer lugar, históricamente la media de lluvias anuales fue de 800 a 1000 milímetros. En la última década  este límite en ealgunos periodos  fue ampliamente superado.

En la parte de nuestro partido que linda con Santa Fe y con el partido de Pergamino existe una serie de arroyos y ríos que ayudan a desagotar los campos de Colón.

El Arroyo del Medio es el curso más importante de agua que tiene el sur de la provincia de Santa Fe y señala además el límite con la Provincia de Buenos Aires. Este arroyo nace de unas de las lagunas ubicadas en el partido de Colón, denominada Cañada de Gómez y de la laguna del Cardozo. El arroyo recorre un largo trecho para afluir al río Paraná por el canal El Yaguarón.

Por su importancia fue denominado el «Rubicón Argentino» a imitación del río Piciatello o Fiumicino del norte de Italia, que era el límite para los ejércitos romanos.

La primitiva denominación de este arroyo fue «Arroyo de Galoso», nombre que lo relaciona con los antiguos poseedores de extensa propiedades de tierras en la zona.

Pasaron los años y fue  denominado «Arroyo Segundo», en los tiempos que el sur de Santa Fe y norte de la Provincia de Buenos Aires se conocían con el nombre de «Pago de los Arroyos».

El nombre «Arroyo Segundo» se debía a que los caudales de agua más importantes de la zona se los denominaban «Arroyo Tercero» que es el actual Arroyo Pavón; «Arroyo Segundo» al Arroyo del Medio y «Arroyo Tercero» Arroyo Ramallo.

El Arroyo Segundo tomará definitivamente el nombre de Arroyo del Medio a partir de 1800.

El arroyo Ramallo, que fue conocido como «Arroyo Tercero» tiene su origen en los Manantiales Grandes y Manantiales Chicos, para desembocar en el río Paraná.

El Arroyo Dulce nace en unos bañados al norte del partido de Rojas y desemboca en el río Arrecifes.

Complicación zonal

La mayoría de estos arroyos complican con las grandes lluvias a la ciudad de Pergamino y los campos aledaños a Colón, Arbolito, Pearson y Juncal.

Para esto se debe entender como es la Cuenca del Río Arrecifes. La red de drenaje principal de la cuenca se inicia en la Canal de Colón, que tiene dos ramas principales que nacen (la que pasa bajo puente de la Ruta 8 cerca de la Comisaría Vial), en una serie de lagunas y vertientes entre Labordeboy, Wheelwright y Hughes.

La segunda rama se inicia  cerca del Frigorífico Hughes. También se encuentra  el arroyo Pelado que forman el río Rojas, éste último junto con el arroyo Saladillo de la Vuelta forman el río Salto que, junto con el arroyo Pergamino se unen en el río Arrecifes.

Otros cursos de agua que forman parte de esta cuenca son los arroyos Manantial de las Piedras, del Sauce o de las Saladas, Saladito Grande, Dulce, Muñoz, de los Ingleses, la Luna, Gómez, Cahuané y de Burgos, entre otros.

Lo cierto es que es una red de desagües que en época de lluvias queda muy sobrecargada para “aguantar” la derivación de campos con pocos árboles, sin surcos, y con caminos que se convierten literalmente en ríos a flor de tierra. Sumado a la creciente erosión de los campos que existe en el norte de la provincia de Buenos Aires y sur de Santa Fe.