En pasadas jornadas visitaron el Lago Municipal, filmando y luego proyectando en el programa “El Camino” el símbolo en medio de la pampa “gringa” como es” El Faro”. La alegría de algunos funcionarios comunales por el “logro” pareciera que no terminan de entender que está crisis económica se debe “manejar” también desde el Estado Comunal con políticas activas.
El cierre de comercios locales es una realidad que marcha sobre ruedas. Ayer se produjeron la baja de persianas de dos carnicerías, y si recorremos los últimas semanas, ya cerraron almacenes, kioscos, y existe en peligro que la tendencia se extienda.
El combo que están sufriendo el comercio local es una “tormenta perfecta”. Las ventas de pan, lácteos, y alimentos varios, prendas de vestir –entre otras cosas- disminuyeron dramáticamente. Los aumentos tarifarios de luz y gas son impagables en dos rubros. Las carnicerías para mantener la cadena de frio y las panaderías para los hornos. Además se agrega los Impuestos, Tasas, pago de empleados etc.
Los alquileres volaron por los aires en sus valores. Hoy muchos comercios se están endeudando para seguir con las puertas abiertas.
Es hora de encontrar alicientes a través de Tasas Municipales.. Se podría descontar la Tasa de Seguridad e Higiene que es la más costosa.
También es hora que el Concejo Deliberante de a luz normativas de protección y promoción a los pequeños y medianos comercios en la ciudad.
Los contribuyentes pagan no para escuchar palabreríos y roscas políticas (incluidos viajes) si esperan una mayor acción de sus dirigentes y más en esta profunda crisis.