Se trata de la granja avícola de Constantini ubicada camino a el Paraje La Juliana cerca de la Escuela 15. En los dos últimos días se murieron 600 aves en un galpón cerrado y todas con una herida en el cuello. Se busca una explicación a lo que por ahora según señala su propietario es un enigma. Para el propietario no es algo natural y los veterinarios no encontraron explicación.
Buscamos una relación entre la forma de la muerte de las 600 aves (gallinas) en Colón y el historial de la misma características Según el Diario el Cuco una familia de la localidad de “El Peral” en Tupungato, registró hechos irregulares en la muerte de algunos animales que de forma extraña fueron encontrados sin vida. Aparentemente, habrían sido atacados por una criatura desconocida. Desde el 20 de diciembre de 2012 los sucesos mantienen en vilo a todos los lugareños.
Los animales afectados, principalmente gallinas, aparecieron muertas
Lo que llamó la atención de los dueños del lugar fue la manera en que murieron los animales ya que no se trataba de envenenamiento ni muerte natural: las gallinas estaban tiradas en el suelo del gallinero con extrañas marcas en el cogote que aparentaban ser pequeños rasguños u orificios de colmillos.
Los hechos comenzaron la madrugada del 20 cuando a las 00:10 horas los finqueros escucharon el aleteo de algunas gallinas y el ladrido de los perros. Cuando llegaron al gallinero, que se encuentra a 10 metros de la casa, observaron sorprendidos que dos de las aves estaban muertas tumbadas en el piso, sin signos vitales ni rastros que indiquen algún tipo de caza por armas de fuego o canes.
Luego de dos días de ataques reiterados, el día 23 los dueños del gallinero decidieron montar guardia con perros cerca de las 00:00 hs durante el horario habitual en que el extraño depredador atacaba. Uno de los encargados de la finca que resguardó en el lugar relató: “llevábamos tres horas esperando y sentimos ruido, vi un bulto gris entre los nogales parecido a un perro. No estoy muy seguro qué era exactamente ya que estaba muy oscuro, solté al perro, lo persiguió, pero la criatura desapareció sin dejar rastro”.
Según las palabras del veterinario que inspeccionó el lugar y los animales muertos junto a “El Cuco”, descartó que se trate de un depredador como una serpiente, comadreja o en último caso un murciélago o ratón. “Es muy difícil que se trate de un depredador de 4 patas, sin duda es una criatura muy ágil. Es obvio que no es un animal cazador, por así decirlo, ya que solo busca hacer daño sin comer nada”, aclaró.