Colón: El escalofriante mundo de las mafias locales y zonales

(Por Victor Calvigioni) La primer detención de Juan Ríos alías el “Herniado” o el “Pampeano”  aconteció en el 2004. El Juez  le dio el beneficio de quedar detenido en un geriátrico. Se escapó. Una investigación de este periodista lo ubicaba en la terminal de Rosario y tomando un ómnibus a Misiones. Habría parado en la casa de un amigo dedicado a la venta de muebles. Cuando la causa se enfrió viajó a la provincia de La Pampa, allí se operó de la hernia, y regresó a Lazarino, su pueblo natal  donde nuevamente organizó una red de distribución de cocaína.  Fue nuevamente detenido. La última noticia es que habría fallecido en la cárcel. ¿Fallecido?

Prostitución, drogas y asesinatos. Los rumores en Colón aparecieron desde el mismo momento que Juan Ríos llegó a la ciudad. Se decía que “El pampeano” estaba en la localidad  «enviado» para organizar redes de comercialización de cocaína. Las versiones callejeras indicaban que ingresaba cocaína y que además organizaba todo la venta al «menudeo» de drogas.

Nunca pudo ser confirmado por ninguna autoridad policial o judicial ni tampoco investigado. Los dichos indicaban que la droga que traía entraba desde Santa Fe. Lo cierto que a la luz de los acontecimientos posteriores, la ruta de la droga desde esa ciudad santafesina habría progresado inusualmente con varias detenciones importantes de «mulas» y secuestros de drogas.

Los acontecimientos que están saliendo a luz en el sur santafesino y la presencia altamente sospechosa en la ciudad de este sujeto nos hace volver a la génesis de aquellos días. En este sentido, lo que se pudo comprobar es que durante un año Juan Ríos, vivió sin trabajo fijo en Colón  y con altos gastos de mantención. También se relacionó con «pesados» del delito que actualmente están en prisión por tráfico de drogas e investigados por trata de personas en Santa Fé. Uno de ellos fue asesinado en un cruce por drogas en Wheelwright.

La Historia

La última actuación judicial ocurrió en junio de 2007. Juan José Ríos alias «El Pampeano» y el «El Herniado» se había profugado el viernes 27 de octubre de 2006, cuando se hallaba cumpliendo una prisión preventiva morigerada con arresto domiciliario en un geriátrico de San Nicolás. Estuvo prófugo y la inteligencia criminal lo localizó en su pueblo natal. El peligroso caco  fue aprehendido en el sur de Santa Fe y además había tenido tiempo de  organizar una pequeña banda para distribuir drogas (cocaína).

El «Pampeano» en ese momento estaba imputado de privación ilegal de la libertad, amenazas, venta al menudeo de estupefacientes en concurso real según los artículos 142 inciso 1º y 55 del Código Penal y artículo 5 inciso «C» de la ley de estupefacientes 23.737.

El procedimiento fue llevado a cabo en el sur de Santa Fe y fue fruto de una serie de medidas que incluyeron solicitud de información a la Central de Información del Crimen Organizado, cruzamiento de llamadas, seguimientos, pesquisas, tareas de reunión de información en toda la zona de posible movimiento del prófugo. Las tareas del grupo de inteligencia pudo determinar la existencia de una hermana del imputado Ríos, domiciliada en la calle Chubut de Rufino y del padre que habitaba una vivienda en la calle San Jerónimo de la misma ciudad.

En la última casa de acuerdo a la información reunida se encontraba oculto Juan José Ríos, desde hacía aproximadamente un mes y medio. Una vez localizado, personal policial diligenció un exhorto librado por el Juez de Garantías Cesar Solazi. Los pesquisas realizaron una serie de allanamientos logrando la detención de Ríos y el secuestro de un arma de fuego, teléfonos celulares y elementos de interés para la causa

  Altísima peligrosidad

Juan José Ríos era un sujeto considerado de altísima peligrosidad y contaba con antecedentes penales por delitos de la modalidad secuestros extorsivos, piratería del asfalto, asalto a entidades crediticias y camiones de caudales, falsificación de monedas, formando parte de las bandas que habían asolado durante años el norte de Buenos Aires, sur de Santa Fe, La Pampa y Córdoba.

En Colón aunque vivió un año no tuvo trabajo fijo, y se lo veía recorrer los bares céntricos, con una rutina  de hacer ejercicios físicos a las diez  de la mañana, dando varias vueltas alrededor de las ocho cuadras de la Plaza Mitre. Lo extraño, es que según la investigación de aquella época, un Juez de Garantías de Pergamino Julio César Solazi, le había dado una prisión morigerada en un geriátrico de San Nicolás. A los dos días se escapó. En Colón habría estado un grupo especial buscando a Ríos. El mismo habría sido enviado por el propio ex Ministro de Justicia León Arslanian.

Una reconstrucción que se habría podido hacer indicaba que al escapar se dirigió a la terminal de la ciudad de Rosario y desde allí a través de una línea de un ómnibus buscó refugió en Posadas provincia de Misiones, donde se resguardó en una casa perteneciente a un amigo dedicado a la venta de muebles. Cuando las cosas estaban más tranquilas se habría dirigido a la provincia de La Pampa, donde incluso se habría operado de la famosa hernia. Ya curado se dirigió a Rufino, provincia de Santa Fe donde habría organizado una banda para vender cocaína y donde finalmente fue atrapado.

Escalofriante

En su primera detención en Colón, Juan José Ríos, nacido en Lazzarino, provincia de Santa Fe fue atrapado por la Policía Bonaerense. Se lo acusó de tener bagullos de marihuana en una quinta ubicada en las afueras de Colón, camino a la Escuela Nº 14 donde se refugiaba luego de raptar a una joven y donde en este caso el propio Intendente Municipal, Ricardo Casi, acompañó a los familiares de la víctima a Pergamino a realizar la denuncia judicial.

En una de los allanamientos efectuados por este caso y en una vivienda en cercanías de calle 54 y 9, apareció «Silvia» una prostituta caída (escapada de un cabaret de Santa Fe) y que había declarado en una causa judicial por la muerte de José «King Kong» Espindola, fusilado sin miramientos con un escopetazo en su vivienda de calle 21 y 60. El hecho aconteció un sábado por la madrugada en el año 2003. El homicidio nunca fue aclarado.

La prostituta Silvia que habría tenido domicilio en la ciudad de San Nicolás habría declarado en la causa judicial abierta que esa noche en una camioneta 4×4, color blanca, llegaron dos individuos que la subieron al vehículo y se dirigieron a la casa de «King Kong» lo llamaron (habría sido a altas horas de la madrugada) y lo fusilaron. Los hombres le habrían dicho a la mujer «para que nadie proteja a las personas que escapan».

Silvia cuando se escapó del cabaret santafesino habría estado en un bar situado en el barrio de 9 de Julio donde dormía y debido a que la cosa se «ponía» caliente se «mudó» a la casa de Espindola. Esta habría sido la sentencia de muerte del colonense.

La camioneta blanca fue buscada en ciudades del sur de Santa Fe pero el Fiscal actuante Dr. Guillermo Villalba nunca pudo comprobar su existencia. Las declaraciones de «Silvia» fueron tomadas como contradictorias dado que fue llamada a prestar testimonio dos veces.

Más datos

Las versiones indicaban que «El Herniado» había venido del sur de Santa Fe y que había tenido serios problemas con gente relacionada con bandas opuestas del narco- tráfico protegidas por policías. En los antecedentes remitidos por los organismos estatales, el detenido tenía una causa judicial abierta con condena en la ciudad de Santa Rosa, provincia de La Pampa, donde se lo acusaba de portar dinero falsificado.

También tenía una causa judicial en Casilda, Santa Fe, por robo calificado.Un tercer informe que provenía de Trenque Lauquen y donde Ríos está acusado por robo simple, en concurso real y hurto simple.