Colón: Dos formas de beneficiar al consumidor final de productos alimenticios

En Colón la ordenanza para frenar la instalación de los supermercados  de origen chinos pasará solamente a  que tenga un estacionamiento adyacente al local de venta. Se debe recordar que hasta el presente la misma podía estar hasta 200 metros del sitio comercial.

Pero es suficiente.  Creemos que no. En nuestra ciudad no hay ninguna ordenanza que regule la instalación de comercios de comestibles. Se da el caso que se habilita tres almacenes en una misma cuadra y que ninguna de ellas puede subsistir.

Por otro lado, los comercios de origen asiáticos tienen una Cámara de Supermercados  que aglutina a más de tres mil empresas y  que regula en forma disciplinaria  los pooles de compra. La organización es perfecta  con una cultura de la unión muy arraigada, y que se puede notar en el precio final de los productos, sobre todo  aquellos que son los básicos de la canasta familiar.

En tanto los comercios colonenses realizan unitariamente las compras a proveedores que ya vienen con valor agregado en su mercancía. La política a seguir sería una fuerte intervención del Estado Municipal para organizar pooles de compras donde el beneficiario  será el consumidor final.

El otro punto a seguir será las condiciones laborales  que tienen los empleados de esos comercios de origen chino. (continuará)