Si tomamos las acciones delictivas de los últimos meses nos daremos cuenta que un noventa por ciento de lo producido por los delitos se comercializan en un mercado “ilegal” en nuestra propia ciudad.
Unos de los elementos que más buscan los ladrones son las herramientas, bicicletas, motos, baterías, neumáticos, teléfonos celulares y garrafas.
¿Alguien se imagina a los a los adolescentes almacenando estos elementos en su casa?.
Un ejemplo, nos pinta un cuadro paisajista de nuestra ciudad. En este sentido, y hace más de dos meses, un individuo que se trasladaba en una camioneta cuatro por cuatro y que tenía una casilla acompañando a una máquina buscaba una garrafa de diez kilos “barata” no importaba el origen. La hipocresía en este caso en su máxima expresión.
En San Nicolás la Policía desbarató una banda que juntaba lo robado y luego llamaba a un remate. Según publicó Diario “El Norte” Tras intensas tareas de investigación, a raíz de un gran número de robos de bicicletas, motos y entraderas en domicilios, personal policial determinó que todo lo robado iba a ser rematado en una vivienda de calle Morteo donde se organizaban los encuentros en los que la gente ofertaría para adquirir elementos robados. Tras un allanamiento se lograron recuperar numerosos elementos sustraídos y también fue detenido un sospechoso.
Pero que quede claro, esto pasa con la cocaína, la marihuana, el alcohol a menores, y otras pestes como los que realizan maniobras para lavar dinero, y donde todos miran para el costado, mientras nuestro futuro que son los Pibes se va por la canaleta del «No te metas». (La Foto corresponde al remate de lo robado en San Nicolás)