– A El hombre acusado de haber atacado a golpes a su padre y de quemarlo luego dentro de un tambor de acero en la ciudad bonaerense de Chivilcoy, confesó ante la Justicia que había discutido previamente con la víctima por la posible puesta en venta de su vivienda y que lo golpeó en la cabeza con una piedra, tras lo cual continuará detenido, informaron fuentes judiciales.
Se trata de Walter Miguel Escudero (37), quien declaró esta mañana ante el fiscal de la causa Sebastián Villalba, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 2 del Departamento Judicial Mercedes.
Fuentes judiciales informaron que durante la indagatoria, el imputado admitió haber atacado a golpes de puño a su padre Miguel Ángel Escudero (66) el miércoles último, y que incluso lo agredió con una piedra en la cabeza.
Según la versión del acusado, el desencadenante de la pelea fue que su padre le comentó que iba a poner en venta la vivienda en la que vivían el imputado junto a su esposa e hijas.
Tras este relato, Escudero, imputado del delito de «homicidio agravado», concluyó su declaración y se negó a responder preguntas del fiscal Villalba, por lo cual no pudo conocerse la versión del homicida sobre si sabía que su padre aún estaba vivo al momento en que lo incineró en un tambor de acero de 200 litros.
Finalizada la indagatoria, el funcionario judicial solicitó convertir la aprehensión del acusado en detención ante el Juzgado de Garantías 2 de Mercedes, y dispondrá de 15 días para pedir la prisión preventiva.
El hecho fue descubierto cerca de las 20.30 del miércoles último, cuando Escudero se presentó en la comisaría 1ra. de dicha ciudad del norte de la provincia de Buenos Aires y confesó que en su vivienda estaba el cadáver de su padre, a quien había asesinado.
Fuentes judiciales y policiales informaron que Escudero relató a los efectivos que había mantenido una discusión con su padre, luego de que éste le avisara que iba a poner en venta la casa donde el imputado vivía junto a su esposa y sus hijas.
Luego de escucharlo, Escudero atacó a golpes de puño y aparentemente con un ladrillo a su padre, hasta que lo dejó inconsciente, tras lo cual lo introdujo en un tacho de acero de 200 litros y comenzó a incinerarlo, al creer que estaba muerto.
Los policías acudieron a la mencionada vivienda, situada en la calle Rosetti al 800, en la ciudad distante a unos 160 kilómetros de Buenos Aires, debido a que se sentía un fuerte olor a quemado.
Allí, los uniformados encontraron el tambor aún con fuego dentro y el cadáver del hombre, añadieron las fuentes.
El lugar del hecho fue preservado por disposición de Bárbara Leranoz, de la Ayudantía Fiscal Local, a fin de que miembros de la Delegación de la Policía Científica de Mercedes realizaran los peritajes correspondientes.
Por su parte, voceros judiciales informaron que la autopsia practicada en el cuerpo de la víctima arrojó como resultado que el causal de la muerte fue la inhalación de monóxido de carbono y que el golpe que recibió en la cabeza fue de carácter anestésico y no letal, por lo que los investigadores intentan determinar si Escudero sabía que su padre estaba vivo al momento de calcinarlo, o si llevo a cabo esa acción para ocultar el supuesto crimen.
En tanto, los informantes indicaron que el imputado fue sometido a pericias psicológicas, cuyos resultados determinaron que comprende la criminalidad de sus actos. (DIB)