Una historia increíble ocurrió muy cerca de Venado Tuerto. En 1976, Ernesto enterró en el patio de su casa en San Gregorio la biblioteca de su hijo que estudiaba en Rosario. En 1979, antes de irse del pueblo, la desenterró y volvió a enterrarla en uno de los terrenos del ferrocarril de dicho pueblo.
Este fin de semana, Joaquin, el hijo de Ernesto y dueño de los libros, los desenterró luego de que los mismos estuvieron escondido por 42 años.
El entierro de los libros se realizó en 1976, cuando nuestro país comenzaba a vivir la sangrienta y destructiva última Dictadura Militar. En aquel entonces muchos libros fueron prohibidos y el solo hecho de poseerlos podría costar la vida o la «desaparición forzada».
«Recuperando historia. Hemos reencontrado mis libros enterrados en 1976», comentó Joaquín y agregó: «Sobrevivimos 42 años después, otra manera de decir NUNCA MÁS».
«Mi viejo me los aguantó en su casa varios meses y, cuando los tiempos fueron más duros, los escondió para preservarlos», remarcó Joaquín.
«Gracias a mi viejo que los preservó. Gracias a la constancia de mi hija María Julia. Gracias a la Comuna de San Gregorio y todos los que se interesaron. Una asignatura pendiente, por fin aprobada», aseguró el hombre que desenterró historia.(LA GUIA)